Entre cinco y diez olmos fueron talados ayer en el parque Oscar Arias, en la barriada María Auxiliadora, a instancias de la Delegación de Medio Ambiente, para evitar que raíces levantaran el pavimento. Los árboles sería sustituidos por otros. La operación se suspendió cuando un grupo de vecinos salió a la calle exigiendo explicaciones y mostrándose en contra de la medida.

La situación ha puesto al descubierto las discrepancias que existen en esta barriada entre la asociación de vecinos María Auxiliadora y las personas que no pertenecen a ella, ya que la tala de los árboles era una petición de la junta directiva al ayuntamiento, cuyos miembros se reunieron con técnicos de la Delegación de Jardines para marcar los árboles que debían de ser eliminados.

Las personas que protagonizaron la protesta, una decena, manifestaron que no se sentían representadas por la asociación de vecinos, a la que negaron toda autoridad para tomar decisiones que afecten a toda la barriada. Entre las razones que esgrimieron para evitar la tala es la sombra que los olmos dan en verano.

Por su parte, el concejal de Obras, Primitivo Muñoz, que fue quien ordenó la suspensión de la tala, ratificó que ésta se hizo a instancia de la junta directiva, y manifestó que "cuando se aclaren que nos lo digan".

Muñoz indicó que los olmos se plantaron cuando el parque era de tierra y que se eligió esta especie sin ningún criterio técnico.