Down Mérida ha diseñado para el curso 2019/2020 distintos talleres y actividades complementarias cuyo objetivo principal es lograr "la integración social de las personas con Síndrome de Down y otras discapacidades, así como mejorar la imagen social de éstas".

Los primeros talleres, que versan sobre sexualidad y cocina, están destinados a adultos de "Vida Independiente" y comenzaron ayer por la tarde en la vivienda que les servirá de hogar adaptado para llevar a cabo todas las acciones de adquisición de habilidades sociales, instrumentales, sociolaborales y básicas de la vida diaria.

Un total de 41 voluntarios, apoyados por personal técnico y de referencia de la entidad, imparten estos talleres que se dividen, principalmente en tres grupos de edad, según informa Down Mérida en una nota de prensa.

Así, están los talleres destinados a los niños hasta seis años; los dirigidos a chicos hasta 16 años y los que se imparten para los mayores de 16 años, la mayor parte de ellos integrantes del grupo de "Vida Independiente".

Quince de las 41 personas que trabajaran con Down Mérida este año, se incorporan por primera vez a las acciones de participación social (voluntariado) de Mérida y todos recibieron la pasada semana un curso de formación básica sobre discapacidad y Síndrome de Down.

Posteriormente, junto a otros voluntarios de otras temporadas y a las familias, formaron parte de una charla sobre normalización e inclusión de las personas con discapacidad, en la que se incidió en la importancia que el deporte, la promoción de la autonomía y la participación social tienen para estas personas.

Todos los talleres y actividades complementarias que desarrolla la entidad entroncan directamente con los objetivos de los programas de Integración Social e Información y Promoción de la imagen de las personas con discapacidad, ambos financiados por la Junta, a través del SEPAD, y que se realizarán hasta el 31 de diciembre.