Esmeralda Carroza no concibe su vida sin haber estudiado la carrera de Psicología. No ejerce como tal, pero sus conocimientos le han servido tanto para conseguir su actual trabajo en materia de asesoramiento ético como para escribir obras literarias destinadas a un público mayoritariamente infantil, aunque también adulto y juvenil.

<b>-¿Cómo empezó su gusto por la escritura?</b>

-En el año 2000 me formé para ser cuenta cuentos, y al final acabé generando un estilo propio a la hora de ser narrador oral que tiene un cierto toque de humor. Yo leía muchos cuentos pedagógicos pero me faltaba el toque de humor, por lo que tuve que empezar a escribir mis propios cuentos.

<b>-¿Qué busca con sus libros?</b>

-Quiero que los niños aprendan. En el caso de Mentirijillas pillas [su último libro], por ejemplo, pretendo que los peques agudicen su ingenio y se den cuenta de dónde les está mintiendo el gato, protagonista del libro, para que así hagan la reflexión de que, si ellos mienten, también pueden ser pescados, y todo a través del juego. Como soy psicóloga, no puedo evitar ese trasfondo de necesidad de que haya algún aprendizaje.

<b>-¿Qué estrategias utiliza para animar a los niños a interesarse por la lectura?</b>

-A parte del juego y las rimas, también uso canciones. Además, intento que en mis presentaciones haya siempre algún baile y alguna marioneta, así como láminas de apoyo visual, pero lo que más me gusta es meter mucho factor sorpresa para que no se aburran.

<b>-¿Ha pensado en escribir otro tipo de género literario además de poesía y cuentos?</b>

-Me gustaría escribir novela histórica para adultos. Yo sé que es un paso que, dentro del proceso en el que estoy creciendo como autora, acabaré dando más pronto que tarde. Es verdad que estoy volcada escribiendo literatura infantil y juvenil, pero eso también me apetece muchísimo y sé que lo haré.

<b>-¿Qué piensa cuando ve que algunos medios la califican de la nueva Gloria Fuertes del siglo XXI?</b>

-Es una enorme responsabilidad moral que yo asumo con cariño. Me doy cuenta de que algunos poemas los he escrito influida por la lectura de los poemas de Gloria Fuertes, pero luego en mi poesía también está el juego y el ritmo. El niño se da cuenta de que te conviertes en una especie de amigo que le hace un guiño a su ingenio, pero sin tratarle como a un tonto, porque creo que el problema que ha habido en la literatura infantil de antaño es que a los niños se les trataba como que no sabían. Gloria hacía cómplices a su ‘pequelectores’, y a mí me pasa igual, así que creo que, de alguna manera, recojo el estribo de ser la Gloria Fuertes del siglo XXI y espero estar a la altura, el tiempo dirá si al final me merezco esa etiqueta o no.

<b>-¿Cómo evalúa el panorama literario y cultural de Extremadura?</b>

-Francamente, me siento bastante orgullosa. Un hecho que a mí me ha llenado de satisfacción fue el caso del niño de Jerez de los Caballeros que ganó un concurso en el Parlamento Europeo por el cual le dieron un premio al mejor lector joven del mundo. Se están haciendo muchas cosas buenas por la cultura en Extremadura, se ha venido trabajando mucho con la alfabetización digital, por ejemplo, intentando que llegara incluso a pueblos pequeños y remotos. Claro que podemos seguir haciendo más, pero yo me siento muy orgullosa y satisfecha. La juventud que tenemos ahora mismo es para mí la gran esperanza, creo que nos esperan grandes generaciones de extremeños muy preparados.