El Teatro Romano se prepara para lucir su mejor cara. El Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida tiene previsto culminar en febrero los trabajos de restauración del frente escénico, actuación en la que se han invertido unos 200.000 euros y que se ha ejecutado de forma escalonada en los últimos tres años para no interferir en el calendario de actividades culturales del recinto. La tercera fase del proyecto, destinada a la mejora de la Valva Regia (la zona central), se adjudicó en noviembre a la empresa Contrafforte Restauro por 79.567 euros y ya está en marcha.

Según detalla el Consorcio, en primer lugar se han realizado labores de documentación, para lo que se han empleado técnicas de fotogrametía con el fin de obtener un plano general y poder registrar todas las partes del muro y cada pieza de mármol, además de documentar su estado inicial de conservación y ubicación exacta. Una vez colocados los andamios (visibles estos días para todos los visitantes que se acerquen al monumento), el equipo de restauradores ha comenzado ya con la limpieza en superficie de todos los mármoles: capiteles y fustes de columnas, molduras y relieves decorativos.

De forma paralela, se están reparando los hormigones y morteros del muro que se han detectado en mal estado por las filtraciones de agua y la exposición a la intemperie. Además, se van a restaurar los dinteles de Agripa.

Una vez terminen estos trabajos se concluirían todas las acciones sobre el frente escénico del teatro romano, pues ya en 2015 y 2016 se llevaron a cabo en la zona este los mismos trabajos de documentación, limpieza, sellado de grietas, saneado de cubiertas y colocación de medios auxiliares para facilitar el acceso y permitir un mantenimiento continuo y cada vez menos invasivo.

El Consorcio destaca que el periodo de ejecución, de noviembre a febrero, se ha hecho coincidir con el de menor afluencia para que el impacto visual, «del que se informa puntualmente a todos los visitantes», se minimice todo lo posible.