Mérida sigue sumando espacios visitables a su yacimiento arqueológico. El próximo será el palacio renacentista de los Corbos, el edificio que se encuentra en el interior del Templo de Diana, que será visitable a partir del próximo año tras una inversión de 150.000 euros. Albergará un centro de interpretación, un espacio en el que se pretende dar a conocer «la gran complejidad» que guarda el monumento por sus distintas funciones a lo largo de la historia. «Se trata del ejemplo más destacado y mejor conservado de la arquitectura templar emeritense y peninsular», afirma el Consorcio.

La puesta en marcha del centro de interpretación comprende la segunda fase de unos trabajos que se iniciaron en el año 2015 con cargo al proyecto ‘Ciudades Romanas’ de la Junta, que permitió que el espacio fuera visitable ya en 2016 con la restauración del palacio y la colocación de pavimientos y escaleras. El monumento, no obstante, ha permanecido cerrado a la espera de culminar el centro de interpretación. Este se ha financiado con cargo al programa Mecenas, que ha contribuido aportando unos 20.000 euros al proyecto. Y a la espera de que abra sus puertas a comienzos del próximo año, su diseño y ambientación ya están perfectamente definidos.

RECORRIDO / El visitante accederá a una zona de recepción (Pronaos) donde se encontrará con una escena sacrificial y la réplica de un togado y un fragmento de la columna de Trajano, todo ello para representar la unión entre religión y política. En la primera sala, a través de un ventanal, se simboliza la destrucción del templo con la visión de columnas derribadas. Aquí se mostrará también una de las figuras más importantes de la exposición: «la de un colosal emperador divinizado». La segunda sala se dedicará a la religión. En la escalera, presidida por un busto de Augusto, se mostrará el mapa de Ortelius con la expansión del Imperio.

La parte superior, dividida en tres espacios, se centra en la época pagana (siglo I hasta finales del siglo IV) y el periodo comprendido entre los siglos V y XV, en el que el templo asume distintas funciones. Por último, se da cuenta de la conversión del espacio en lugar privado al servicio de la familia Alvarado Messía (palacio de los Corbos).

En la Logia (galería cubierta), se hará referencia a la figura del cronista emeritense Bernabé Moreno de Vargas, que dio a conocer el edificio en siglo XVII. En otra parte se quiere recrear el Foro de Augusta Emérita en el siglo I, además de exhibir restos arqueológicos, grabados de Alejandro de Laborde y fotos de finales del siglo XX.