Los expertos aseguran que escuchar música suele traer beneficios para la mente, pero puede suponer además un complemento perfecto para la rehabilitación de personas con deficiencias psíquicas. Eso es al menos lo que piensa Juan Pérez, director de la escuela de música Juan del Encina, que va a poner en marcha a partir de octubre una iniciativa pionera en la ciudad: la musicoterapia.

Se trata de utilizar la música como un medio para ayudar a la recuperación terapéutica, "que no es un sistema milagroso", asegura Pérez, sino un elemento más para completar la rehabilitación de estas personas, sobre todo de niños autistas. Así, el objetivo es doble.

Por un lado, dos musicoterapéutas tratarán a los niños con un diágnóstico clínico ya determinado, "trabajando con ellos en su patología concreta". Por otro lado, tratarán de utilizar esta técnica para reeducar a los niños; es decir, "para integrar a los niños con deficiencias leves en el proyecto curricular de la escuela".

PEQUEÑAS SESIONES

Todo esto deberá dar sus frutos poco a poco, ya que según el director de la escuela, se aplicarán sesiones individuales de media hora, con un programa específico según la patología concreta de cada niño, a cargo de los profesores de música, de instrumentos y los musicoterapéutas.

Este es sólo el primer paso, ya que la intención es crear una asociación de musicoterapia y presentar el proyecto a la Junta o entidades que la quieran cofinanciar. En cualquier caso, no les falta ilusión y concienciación, aunque "no se trata de ninguna varita mágica y es un tema todavía muy desconocido para los propios padres".

La idea es original y ya esperan el piano, el violín, la guitarra... con notas muy sensibles.