A dos años vista de que finalice su segundo mandato al frente de la Asociación de la Virgen y Mártir Santa Eulalia, Luis Miguel González avanza los proyectos que se quieren acometer y analiza las iniciativas que se están poniendo en marcha para difundir la figura de la patrona emeritense y el pasado eulaliense de la ciudad.
-En junio de 2021 finalizará su mandato como presidente de la asociación, ¿qué proyectos se prevén para los próximos dos años?
-Los proyectos que tenemos para los próximos dos años se aprobaron en una asamblea en junio y son bastante ambiciosos. Se aprobó la restauración del templete procesional del paso de Santa Eulalia y la restauración de un traje que se le donó a Santa Eulalia y que está pendiente de datación en la Universidad de Valencia. También se van a sustituir cuatro de las ánforas procesionales del paso y se harán reformas en el vestidor de la asociación para cuidar y mantener debidamente los trajes que tiene Santa Eulalia. Por otra parte, queremos seguir con las iniciativas que están desarrollando distintas asociaciones con las que colaboramos para la divulgación del pasado de la ciudad y la reivindicación de esos caminos de peregrinación que terminaban en Mérida.
-¿Podría volver a ser Mérida el centro de peregrinación que fue?
-Recuperar el papel que jugaba Mérida en el siglo VII sería una quimera. Hoy por hoy, el destino fundamental es Santiago de Compostela, porque lo han trabajado, y ha heredado ese papel que en su momento tuvo Mérida. Lo que sí podemos, e intentamos, es colaborar para que Mérida se reconozca como ese destino de peregrinaciones que fue, para volver a recuperar esa tradición, con esos caminos que llegaban hasta Mérida, y que hoy por hoy siguen funcionando como es el caso de los caminos mozárabes.
-El próximo día 30 se constituirá el Consejo Eulaliense, un organismo que marcará las directrices para reivindicar a Mérida como cuna del cristianismo, ¿cómo valora esta iniciativa del consistorio?
-La valoramos muy favorablemente. Tanto el ayuntamiento como la asociación, y otras muchas asociaciones que existen en la ciudad, estamos trabajando para potenciar todo ese pasado histórico de la ciudad, divulgarlo y poder recuperar Mérida como destino de peregrinaciones. Desde el ayuntamiento habrá un interés por incrementar el número de pernoctaciones de peregrinos que visiten la ciudad y por nuestra parte, desde el punto de vista religioso, de incentivar el culto hacia Santa Eulalia y todo lo que a nivel religioso pueda traer consigo. Al final es una comunidad de intereses y este Consejo Eulaliense va a permitir que estos distintos intereses se articulen en beneficio global de la ciudad, tanto desde el punto de vista religioso como económico.
-Entre las ideas que se han puesto encima de la mesa destaca la consecución de un Año Jubilar, ¿qué supondría para la ciudad?
-Obtener un Año Jubilar para la basílica en 2023, que es lo que se está intentando, supondría una revitalización de la basílica como templo jubilar y atraería a muchos más visitantes que querrían conocerla. El número de peregrinos que iba a Santiago de Compostela antes de que se pusiera en marcha el proyecto Xacobeo era muy limitado, la puesta en marcha de ese proyecto y toda la difusión que se le dio supuso un incremento bastante importante en el número de peregrinos. Las pequeñas acciones que se quieren hacer al final repercutirán en que se conozca a Mérida con la importancia histórica que tuvo e incrementará el número de visitantes que quieran conocer nuestro pasado histórico.
-Con respecto a la procesión que recreará los martirios de Santa Eulalia, ¿cree que servirá para que los emeritenses conozcan mejor a su patrona?
-Ese es uno de los objetivos, permitir ampliar sus conocimientos a aquellos fieles que quieran y, sobre todo, demostrar la devoción que se le tiene a Santa Eulalia.
