El valor catastral medio de las parcelas urbanas ha crecido casi un 40% en los dos últimos años por la incorporación de nuevas edificaciones no incluidas en el anterior registro. Así, y según los datos del Catastro, en el 2002 el valor catastral de las 30.676 unidades contabilizadas rondaba los 825 millones de euros, lo que supone en torno a 27.000 euros por parcela.

Según los datos facilitados por la delegada de Urbanismo, Gloria Constantino, con la inclusión de las nuevas urbanizaciones el valor catastral global se eleva a 1.222 millones de euros, pese a que sólo se han sumado 1.385 contribuyentes nuevos, lo que significa que el valor medio está ya en 38.000 euros.

De este modo se explica que, aun habiéndose mantenido el coeficiente para calcular el Impuesto de Bienes Inmuebles en el 0,78, la recaudación crezca un 25%, hasta alcanzar los ocho millones de euros, cuando el número de recibos sólo se incrementará un 4,5%.

Este incremento se verá significativamente elevado cuando se proceda a la revisión total (en esta última actuación ha sido sólo parcial para las nuevas zonas) y se vuelvan a valorar todos los inmuebles.