Técnicos de urbanismo y peritos de diferentes aseguradoras visitaron ayer el edificio de la calle Graciano afectado por un aparatoso incendio para valorar los daños causados por el fuego. Las llamas se originaron en el garaje del inmueble tras salir ardiendo un vehículo y afectaron a varios coches y una moto que estaban también estacionados, así como a varias viviendas del bloque. El suceso ocurrió el miércoles.

El alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, que visitó ayer a los afectados, agradeció el trabajo de los bomberos, el de la policía local y el 112. «Por fortuna no ha habido que lamentar daños personales; hay que agradecer el esfuerzo de los bomberos y ahora estamos esperando la valoración de los peritos y de los técnicos municipales de urbanismo. Lo importante es atender a las familias hasta que puedan volver a sus viviendas y darles alojamiento» dijo. Por su parte, el jefe del parque de bomberos de la ciudad, José Palanco, explicó que «en el garaje se han llegado a registrar temperaturas de más de dos mil grados».

Para sofocar el fuego los agentes solo tenían un acceso, por lo que tuvieron que habilitar otros como el hueco del ascensor. En el incendio intervinieron nueve bomberos y tres camiones del parque de Mérida y una dotación de Puebla de la Calzada. «Sabíamos que las elevadas temperaturas producirían daños y ahora hay que valorar un pilar con una prueba de carga», concluyó. H