Hace unos años era impensable que se pudiera poner en venta el convento de las Concepcionistas, de la Orden Franciscana, incluida en la Iglesia. Su fundador fue Francisco Moreno de Almaraz , en el siglo XVI. Se han ido a Sevilla y como el último patrono, Francisco López de Ayala y de la Vera , se lo cedió a las monjas, aunque estas quisieron donarlo al obispado, este no lo aceptó. En estos momentos, se vende la manzana completa por mil millones de pesetas, seis millones de euros.

Ya no hay nada dentro. El retablo del hospital San Juan de Dios, que había sido donado por el ayuntamiento, ha sido trasladado a la ermita de Nuestra Señora de la Antigua. Era más alto y en la parte superior adornaba una de las paredes. El retablo tiene pinturas de San Joaquín, Santa Ana, San José, San Antonio, Santa Isabel y Santa Lucía. ¿Dónde están algunas imágenes y un Niño Jesús que era una obra de arte? El convento está en el mismo centro de la ciudad y da a cuatro calles: Concepción, San Francisco, plaza de la Constitución y Beatriz de Silva.

Cada año, el 8 de diciembre el alcalde de la ciudad, desde 1620, hace el voto de la Inmaculada en presencia de las autoridades de la ciudad y la feligresía que siempre llena la iglesia para este acto. Después se departía con las monjas y sacaban unos dulces hechos por ellas y un vino dulce de consagrar . Hoy se hace en la Concatedral de Santa María. No es lo mismo.

Es una pena que nos hayamos quedado, como tantas otras cosas, sin el convento, sin la Iglesia y, quien tenga ganas de comprar y seis millones de euros, puede hacerse con la edificación. 400 años con nosotros y ya es historia. Los millones marcharán a Sevilla. Si Francisco de Almaraz , que luchó al lado de Pizarro , pudiera ver cómo se vende lo que con tanta devoción donó a la ciudad, a su ciudad, sacaría su espada y lucharía por su conservación.

Nosotros, lo de siempre. Silencio.