El turismo no ha sido una excepción. La caída de la actividad económica ha repercutido negativamente en el principal motor de la ciudad, que ha visto descender el número de visitantes que el año pasado registraron los diferentes monumentos. Los datos ofrecidos días atrás por el Museo de Arte Romano, que recibió casi 200.000 visitantes, un 10% menos que el año anterior, ya advertían que el balance anual de visitantes al yacimiento arqueológico emeritense no sería positivo.

En total hubo 308.312 visitantes, lo que supone un descenso también del 10% con respecto a las cifras habituales. El director del Consorcio, Miguel Alba, avanzó ayer algunas de las estrategias que se pondrán sobre la mesa para, al menos, recuperar los niveles anteriores. Una de estas iniciativas pasa por ampliar el horario de visitas y, más concretamente, fomentar el acceso nocturno a los monumentos, una propuesta que, al menos en los meses de verano, animará a los turistas a contemplar los restos sin soportar los rigores del estío extremeño. Por otro lado, un atractivo circuito de visitas nocturnas podría ayudar a elevar las cifras de pernoctaciones en la ciudad.

De esta forma, a las ya habituales visitas nocturnas en el Teatro y el Anfiteatro --también al Museo Nacional de Arte Romano-- se sumarán a lo largo del presente año la Alcazaba y Morerías, mediante la instalación de sistema de iluminación interior. En el recinto amurallado se desarrollará un circuito interno de visita y se preparará el jardín de antigüedades como un museo al aire libre.

Por otro lado, Miguel Alba, en un encuentro con los periodistas con motivo de la firma de un convenio con la Asamblea de Extremadura, se refirió a la finalización de las excavaciones en el Teatro Romano, sobre las que dijo que en breve comenzarán los trabajos de estudio de los materiales encontrados, informa Europa Press. En ellos trabajarán los 30 científicos del proyecto, que aportarán nueva información sobre la cronología del teatro, teniendo en cuenta tuvo reformas y restauraciones.