La obra pictórica más antigua que posee el ayuntamiento vuelve a las dependencias municipales. Se trata del cuadro El festín del rey Baltasar, una pieza del pintor Luis de Mendoza, perteneciente al siglo XIX, que ha sido restaurada por el Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la Junta de Extremadura. El cuadro reproduce un pasaje del Antiguo Testamento de la Biblia narrado en el libro de Daniel y es, además, una réplica de una obra del pintor inglés John Martin.

El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, destacó que la pintura es de «incalculable valor para el ayuntamiento y la ciudad». El regidor explicó que esta obra había sufrido un «grave deterioro» debido a los cambios de temperatura y el humo del tabaco. «Quiero agradecer que hayan hecho esta magnífica restauración», puntualizó el regidor municipal.

Cabe destacar que Luis de Mendoza fue un músico, pintor, poeta y traductor de francés, nacido en el municipio de Jerez de los Caballeros, que vivió en Mérida, donde ejerció de presidente de la Subcomisión de Monumentos. El propio artista fue quien donó esta obra al ayuntamiento emeritense para que pudiera ser contemplada por todos los ciudadanos.

Por su parte, la restauradora María Antonia González matizó que la obra no ha podido ser restaurada «al cien por cien» porque no tenía capa de barniz y había sufrido una restauración anterior «bastante agresiva». Los trabajos de limpieza del lienzo han durado varios meses, sobre todo debido a que el marco también ha tenido que ser restaurado y «ha dado bastante guerra».

La consejera de Cultura e Igualdad, Leire Iglesias, informó de que con la entrega de este trabajo al consistorio emeritense se abre una «línea de colaboración» con las instituciones municipales para «acercar el patrimonio a los ciudadanos y ciudadano. En esta línea, avanzó que se va a proceder a retirar el retrato de Fernando VII, de Vicente López, para restaurarlo.