CONSEJERA DE CULTURA Y TURISMO DE LA JUNTA DE EXTREMADURA

La importancia que el título de Capitalidad Cultural Europea tiene para la historia y el futuro de la ciudad designada, no debe ser valorado a la ligera ni desde criterios superficiales. La historia nos ha demostrado que Madrid (1992), Santiago de Compostela (2000) y Salamanca (2002), ciudades españolas a las que se concedió dicha denominación en años anteriores, se convirtieron en un caso práctico de lo que la Capitalidad supuso para su economía, su vida cultural, su atractivo turístico y la fuerza de su nombre no sólo en España sino en Europa. Ser Capital Cultural Europea otorga un pozo de resonancia de las virtudes de la ciudad que ostenta la denominación. Por ello, Cáceres, no sólo utilizado este nombre como denominación de una ciudad física sino como un todo que engloba a la ciudadanía, a instituciones y a empresas, ha realizado un trabajo soberbio para construir un proyecto firme, consolidado y lleno de acciones innovadoras, que demuestren que Extremadura es digna aspirante a convertirse en punta de lanza del crecimiento de los próximos años. Cáceres siempre ha sido consciente, y por ello ha destinado tiempo y esfuerzo a este proyecto, de qué supone ser Capital Cultural.

Desde mi punto de vista, como máxima responsable de la Cultura y el Turismo en Extremadura, estoy convencida de la potencialidad que Cáceres tiene en estas dos áreas concretas. La Capitalidad no debe ser un fin, sino un medio para multiplicar los recursos culturales y turísticos de los que la ciudad cacereña dispone.

El trabajo de los últimos años en la construcción de un proyecto sólido, ha servido para abordar mejoras en ámbitos como la accesibilidad de las zonas históricas, el aumento de la calidad de los establecimientos que ofrecen servicios turísticos, la apertura de nuevos centros museísticos, que se unen a los ya existentes, o la creación de infraestructuras que establezcan una red de servicios básicos a empresas que quieran convertir Cáceres en un punto de referencia en el área de negocios.

Por ello, el día 27 de septiembre simplemente es un día para demostrar y hacer públicos a toda España, los puntos fuertes que Cáceres tiene y que seguirá teniendo, sea o no Capitalidad Cultural Europea en el 2016.