Cáceres y la fuerza de su abrazo" es el título genérico del proyecto que se defiende mañana en Madrid, en el Centro Reina Sofía. Francisco Javier Pizarro, coordinador del comité de expertos que lo ha redactado, explicó así su significado en la presentación a los medios el pasado mes de julio: "Es un gesto de compromiso, de respeto hacia el entorno, de reconocimiento y de cariño entre culturas, entre Extremadura y Europa, entre Europa y América". Un abrazo que refleja una de las principales características de los extremeños, su carácter de sociedad abierta y solidaria, que quiere recibir a Europa en 2016. Pizarro indicó entonces que la ciudad quiere "devolver a Europa, a través de una manifestación cultural única, todo el apoyo que nos ha prestado en las últimas décadas".

Desde Cáceres 2016 se señala que la candidatura cacereña cuenta con "principios sólidos que parten de la esencia de la ciudad y de la región y que se ajustan a los criterios que exigen la Unión Europea".

En la presentación a los medios del proyecto --de lo que hasta el momento puede desvelarse-- se recordó a todos los ciudadanos y técnicos que han contribuido a hacer realidad esta iniciativa, desde las instituciones, y pasando por el mundo de la cultura y la empresa.

La primera gran idea del proyecto que Cáceres 2016 entregará al jurado es convertir Cáceres y Extremadura en un gran puente entre Europa y América Latina. Los vínculos que unen ambos territorios son históricos, desde el propio Descubrimiento de América.También las relaciones transfronterizas entre Extremadura y Portugal se convierten en otro elemento clave de este puente entre continentes.

El otro gran eje temático de Cáceres 2016 propone una reflexión sobre humanismo y valores europeos, en la que por su puesto la figura del Emperador Carlos V y la labor de la Fundación Academia Europea de Yuste son elementos primordiales.

El tercer y último gran pilar del proyecto Cáceres 2016 es impulsar un modelo de crecimiento basado en la cultura a partir de la Estrategia Europa 2020 que persigue la integración de la sociedad con el entorno. El puente entre Europa y América, la reflexión sobre el humanismo y los valores europeos y el modelo de crecimiento basado en la cultura cristalizan en el programa cultural de la propuesta, llamado Cáceres CulturaLAB Europa 2020. La cultura se perfila como "impulsora de un crecimiento inteligente, sostenible e integrador, que sirva para reflexionar además sobre los valores de Europa y para estrechar relaciones con los países de América. Se materializará en un laboratorio cultural que llenará de debates, talleres y manifestaciones artísticas las calles de Cáceres y los municipios extremeños en 2016", recoge la nota de prensa de la presentación.

El programa cultural se vertebrará en cuatro bloques temáticos: ´Europa, el humanismo acumulado´, para la reactivación de los valores europeos; ´Lecciones desde la saturación´, que tratará el cambio hacia ciudades sostenibles; ´Lecciones desde la carencia´ que aborda la cultura como propulsora del cambio; y ´Cuando el territorio siembra inspiración´, una invitación a Europa a sumarse al programa.

Dentro de cada uno de estos bloques temáticos albergará varios ´programas marco´, para organizar por temas todas las actividades del 2016.

Aunque todavía no se pueden dar a conocer estos ´programas marco´, en la presentación a los medios de este verano se puso como ejemplo a ´365 Happenings´, que evocará la figura del artista alemán Wolf Vostell, quien se casó y estableció su residencia en Extremadura. Está previsto que artistas de toda Europa hagan sus ´happenings´ en la ciudad.

Otros programas serán ´Vivir en verde´, conciliación entre sociedad y crecimiento por medio de los artistas, y ´El viejo continente´, sobre acciones de progreso social. Ciudadanos y colectivos de toda condición y procedencia disfrutarán de estas acciones que llenarán la ciudad de talleres, eventos y exposiciones.

Ahí no se limitan los acontecimientos de Cáceres 2016. Habrá cuatro grandes eventos para celebrar el paso de una estación otra en los que se rendirá homenaje a culturas y territorios que se convertirán en protagonistas: Europa, Portugal y Polonia, país este último que también tendrá una ciudad capital europea de la cultura, aún por designar.