El año 2009 ha sido difícil para muchas explotaciones agroganaderas en Extremadura. Además, aunque la producción ha sido aceptable la bajada de los precios ha hecho que la rentabilidad de muchos cultivos no haya sido la esperada. Otro grave asunto es la abismal diferencia entre los precios de los alimentos para el consumidor final con respecto de los precios que se pagan a los agricultores y ganaderos por sus productos.
Con el comienzo del plazo a principios de febrero para la solicitud de las ayudas de la PAC --489 millones de euros-- se inicia oficialmente el año agrícola. Hasta el próximo día 30 de abril se podrán pedir. Las principales entidades financieras ofrecen ventajas para que los agricultores tramiten con ellas estas ayudas, incluso llegando al anticipo del 100% de las mismas.
El actual 2010 se plantea como un año difícil desde el punto de vista de la economía y las distintas organizaciones agrarias piden soluciones a la crisis en la que está envuelto el campo.
Dos sectores que viven su particular ´calvario´ son los de la aceituna y la vid. Para ellos se puso el año pasado a su disposición un fondo de 2,2 millones de euros y se prevé atender a 12.000 olivareros y más de 4.000 viticultores. Para fomentar la cría de caballos y las actividades de ocio ligadas a esta ganadería la Administración puso en marcha un Plan de Fomento al que dedicó 2 millones de euros.
El sector ovino-caprino no atraviesa uno de sus mejores momentos, puesto que existe una bajada del consumo. Para ayudar a la recuperación de este sector, España contó en 2009 con 73 millones de euros, de los cuales una gran parte fueron a parar a Extremadura. Gobierno regional trabaja para reorientar el futuro de la PAC y consolidarla como un instrumento de apoyo vital para garantizar la viabilidad y rentabilidad de la agricultura y la alimentación en Europa.
