El próximo Domingo de Resurección los pastores de la comarca se visten con sus trajes de fiesta y acuden a la villa trujillana. Muchos de los más pequeños acuden con sus hijos que conducen un cordero engalanado. Lo normal es no parar de bailar al son de las canciones tradicionales que escribió el poeta ´Goro´ (1893-1965) con la excelencia extremeña y trujillana como tema principal. Fue redactor de La Opinión , un periódico local, y corresponsal de Abc . La música es del grupo Claveles . La transmisión oral ha propiciado que las canciones pasen de padres a hijos y no se hayan perdido. La gastronomía es otro de los alicientes de este día, ya que mientras se canta se consumen los típicos hornazos, empanadillas y bollos de Pascuas. En definitiva, Chíviri es una fiesta donde "nadie se siente marginado o rechazado". La celebración continúa el Lunes de Pascua con una romería que en las cercanías del municipio, en la zona denominada ´La Dehesilla´.

Este año la gran preocupación del ayuntamiento es la limpieza. De hecho, el concejal de Festejos Cándido Fernández ha hecho un llamamiento a la responsabilidad ciudadana para que la plaza se ensucie lo menos posible a pesar del trasiego de miles de personas. Se han repartido al efecto unos 40 contenedores en el centro de la ciudad y reforzado retenes. Igualmente se fomentará el que se formen corros, evitando la colocación de mesas, sillas o cualquier tipo de obstáculos en la vía pública. También se anima a los vecinos a que engalanen sus balcones con distintos tipos de mantos, además de acudir con sus vestimentas típicas.

El cartel anunciador de este año es una foto panorámica de la plaza Mayor llena de gente con detalles del refajo típico.

Muy habitual es celebrar la llegada del visitante colocándole al cuello el pañuelo rojo, en el que se suele indicar el año.

La necesidad de dar más alicientes turísticos a la jornada ha propiciado que por la tarde la plaza acoja un festival folclórico, que este año ha cumplido su vigésimo sexta edición, con la participación de diversos grupos internacionales, nacionales y, por supuesto, de la comunidad extremeña. Este año le toca el turno a Muérdago Extremeño, un grupo que se ha caracterizado por el empleo de un instrumento también tradicional como el rabel, un primitivo violín que se empleó para cantar los romances populares.