Animarse a cantar y bailar tras las comidas y cenas navideñas ayuda a hacer la digestión y a sentirse "más ligero", según afirman los especialistas de la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA).

Los hipertensos deben cuidar especialmente su dieta dado que son más propensos a tener exceso de peso. Los kilos de más asociados a las comilonas propias de estas fechas tienen como consecuencia que las cifras de presión arterial y los niveles de colesterol y triglicéridos se disparen y, con ello, el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.

DESPACIO CON PLATO PEQUEÑO

Así, los especialistas aconsejan comer despacio y charlar con la familia o compañeros durante la comida o la cena, esperando un minuto entre bocado y bocado, dejando descansar los cubiertos en el plato. También es recomendable utilizar 'platos pequeños' para reducir la cantidad de alimentos y dar 'largos paseos' la mañana siguiente de las cenas en fechas señaladas.

Es igualmente importante evitar el alcohol en demasía, que contiene muchas calorías 'vacías' y, en la medida de lo posible, no comer de un plato común, para poder controlar mejor las porciones ingeridas.

ORGANIZA TU CENA DE EMPRESA Las celebraciones de Navidad tienen como principal virtud volvernos a todos más humanos y hacer que olvidemos rencillas y problemas personales. Los almuerzos y cenas de estos días permiten que jefes y empleados compartan un momento agradable. La crisis económica puede que haya propiciado que esa tradición se pierda, pero si son los propios empleados los que la organizan y se paga a escote el problema está solucionado.

Los establecimientos de hostelería de toda la región programan con motivo de las fiestas navideñas unos menús especiales en los que por un precio más asequible que el resto del año se ofrecen platos exquisitos y sorprendentes.

Lo importante en un evento de este tipo es no olvidar a nadie, para que nadie se sienta excluido, pues de lo contrario podría tener el efecto contrario y hacer el problema más grande.

Muy importante es la elección del restaurante. No debe ser caro para que todos los bolsillos puedan acceder a él, tener la calidad suficiente y comida variada, pues no todos los compañeros pueden tener los mismos gustos.

Para que el encuentro tenga éxito lo mejor es crear algún acontecimiento divertido en el que todos puedan participar, como el intercambio de regalos, el 'amigo invisible' o un sorteo. En este caso pueden pedirse a los proveedores de la empresa algún obsequio, que sin duda facilitará. También es aconsejable tener programada una actividad para después del evento, generalmente tomarse unas copas, aunque hay que evitar los desplazamientos en coche porque de lo contrario siempre nos puede quedar el mal recuerdo de una multa en un control de alcoholemia o un accidente en el peor de los casos.