El objetivo es que se sientan como en casa, pero bien atendidos y activos. Aunque los centros de día para mayores han sentido de forma clara las consecuencias de la crisis económica, no puede olvidarse que son una interesante opción si queremos que el anciano esté bien atendido y que además pueda dormir en su propia casa. La Federación Empresarial de Asistencia a la Dependencia (FED) indica que en 2009 el nivel de ocupación de los centros de día no llegó al 60%.

Por el contrario, según un estudio que realizó Consumer Eroski sobre 134 centros de día en todo el país, estos obtuvieron una calificación notable, aunque una mayoría tenía listas de espera. "Los centros de día deben ofrecer servicios de prevención rehabilitación y mantenimiento de la autonomía personal", indica ese mismo estudio.

Los programas de estancia diurna tratan de mejorar o al menos mantener los niveles de autonomía personal del mayor, además de servir de apoyo tanto a la familia como a los cuidadores. Con estos centros la tercera edad debe disfrutar de su tiempo libre. Lo mejor es ponerse en contacto con un asistente social, para que oriente sobre las fortalezas y debilidades de cada centro.

Además debe informarse sobre cuáles son los requisitos para acceder al centro, así como la documentación a aportar, puesto que normalmente hay que acreditar estar empadronado en el municipio y no tener enfermedades infecto-contagiosas en estado terminal. Estos centros de día pueden ser públicos, privados o concertados, al igual que las residencias de ancianos.

También estos centros se clasifican en función de los usuarios como centros para válidos, para asistidos, centros mixtos y psicogeriátricos. Estos están especializados en personas con problemas como el Alzhéimer. Antes de tomar una decisión precipitada lo mejor es leer el reglamento de régimen interno y el contrato de admisión a fondo. Normalmente estos centros ofrecen servicios de atención personalizada, enfermería, comidas y fisioterapia. La mayoría cuentan con una zona de recepción, guardarropa, comedor, zona de actividades, así como baños adaptados a las necesidades de los mayores, agua caliente, calefacción, teléfono y todo accesible con silla de ruedas.