Durante estos días, Juan Carlos Bautista atiende el expositor de Casa Bautista, una empresa familiar fundada en 1925 con décadas en el sector y que es un emblema de calidad en el jamón ibérico de bellota. Asentada en Montánchez, un enclave perfecto para asegurar el producto de calidad, cuenta con tiendas en el mismo lugar y también en Trujillo. El cerdo de betolla y ese jamón contrastado es su bandera, aunque como asegura Juan Carlos, el consumidor también apuesta por el diario y toda esa gama de ibéricos en todas sus vertientes. Adscrito a la denominación de origen Dehesa de Extremadura, Casa Bautista mima a los cerdos de la dehesa, entrando en la montanera con 8 o 9 arrobas y saliendo de ella con 15 o 16. Un cuidado de cinco años desde el nacimiento del cerdo hasta que el producto es apto para su consumo.