Hace cuatro meses que José María Gallardo accedió a la presidencia de la Federación Extremeña de Caza, que durante años ostentó Rafael Domínguez. Transmite juventud --tiene 31 años-- y tiene la fuerza y la voluntad necesarias para mejorar la situación de un sector que vive un momento complicado.

--¿Cómo se presenta este año la temporada de caza?

--Complicada. En Extremadura tenemos un problema muy grande. No tenemos caza menor. Es cierto que la caza mayor es lo que nos mantiene y cada vez atrae a más aficionados. Pero la menor, por mucho trabajo que le echemos, no prospera. El conejo se nos muere y la perdiz es una utopía en muchos cotos. Aunque los cazadores digamos que la cría de la perdiz este año nos va a acompañar, a mí me gustaría ir al campo y ver lo que realmente hay.

--¿Cuál es la causa de esta merma de la caza menor?

--El campo está lleno de veneno. Todos los días echan productos fitosanitarios, herbicidas, plaguicidas. Es una auténtica barbaridad. Las enfermedades del conejo como la mixomatosis y principalmente la hemorrágica vírica están haciendo estragos en esta especie. Por muy bien que se críe un año a los dos siguientes viene un brote diferente. Es un gran problema que hoy domingo abordaremos en el Tercer Encuentro de Sociedades que reunirá en Feciex participantes de alto nivel técnico. Entre todos ellos trataremos de abordar este problema.

--¿La burocracia sigue siendo otro de los grandes problemas de los cazadores?

--Lo sigue siendo. Con la nueva Ley de Caza se pretendía que la burocracia dejara de ser un problema, pero actualmente, aunque algunas cosas se han solucionado, sigue siendo un gran obstáculo.

--¿Puede poner un ejemplo?

--Pues cuando una especie cinegética hace daño a la agricultura. Esto requiere un control inmediato y no podemos estar esperando un mes por ejemplo mientras los jabalíes hacen daño hasta que llegan los permisos de captura.

--¿Y la caza mayor se presenta entonces bien?

--Sí, precisamente el abandono del campo ha propiciado que la caza mayor encuentre hábitat más idóneos donde reproducirse. El aumento de la caza mayor unido a la buena gestión de los propietarios de cotos redunda en esta buena situación.

--¿Cómo va a ser su línea de trabajo con respecto a su antecesor Rafael Domínguez?

--En los aspectos que eran buenos continuista y en los que yo no veía tan buenos pues totalmente revolucionarios. Para empezar en la nueva junta directiva se ha introducido gente joven con muchas ganas de trabajar. Tenemos un tesorero, cosa que antes no existía y era una figura obligatoria. Un experto economista será quien ahora lleve las cuentas de la Federación Extremeña de Caza. Hay savia nueva en el mundo de la caza, lo que no hay es dinero. Tenemos muchas ganas de trabajar y hacer una federación más grande, pasando de 15.000 federados a 25.000. Ese sería nuestro sueño.