Una nueva investigación sobre ciencia de los alimentos realizada por la Universidad norteamericana de Cornell ha revelado que la composición del agua afecta los beneficios para la salud del té. De hecho, ha comprobado que el elaborado con agua embotellada tiene más antioxidantes que el realizado con agua del grifo, si bien tiene un sabor más amargo. En las pruebas realizadas en el Centro de Evaluación Sensorial de Cornell, a los consumidores les gustaba el té verde elaborado con agua del grifo más que con agua embotellada, ya que producía un sabor más dulce. “Pero, cuando se remojaba en agua embotellada, el té verde contenía aproximadamente el doble de la cantidad de antioxidante galato de epigalocatequina (EGCG), lo que lo hace más amargo que el té preparado con agua del grifo”, explica Robin Dando, profesor asociado de ciencias de la alimentación la universidad. “Si estás bebiendo té verde por sus propiedades saludables deberías usar agua embotellada --resume Dando--. Si estás bebiendo té por el sabor, el agua del grifo es mejor”.