Como viene siendo tradición desde hace ocho años, Pinofranqueado celebra mañana día 6 de agosto el Viernes Mayor. Por un día, las calles de este pueblo estarán ocupadas por el clásico mercado. Allí se puede encontrar todo tipo de artesanos y de productores locales (miel, polen, el mimbre, etcétera). Se trata de un acontecimiento dedicado a la promoción turística, la industria, gastronomía y artesanía de la zona.

Con el paso del tiempo, este mercado se ha arraigado en la zona y se espera que se celebren muchas ediciones más. El éxito reside en el empeño de los empresarios de la localidad que como la primera vez, apuestan por aunar lo tradicional y lo nuevo, la cultura y el turismo. De este modo, organizan un mercado en el cual todo está presente, dan a los artesanos y productores locales un escaparate donde mostrar sus productos. Mientras vecinos y visitantes disfrutan de un día especial que con el paso del tiempo se va convirtiendo en una festividad más del municipio.

Este año, en concreto, toda la persona que se acerque al mercado podrá disfrutar desde primera hora, no solo de un mercado tradicional, sino que mientras lo recorre, puede degustar productos típicos como las perrunillas, ofrecidas por las panaderías de la localidad, los licores el Pichín Real y el Ciripolen que se producen en la comarca. También podrán saborear la miel, producto estrella, que año tras año está presente este día como elemento de pasado, presente y futuro. La apicultura en Las Hurdes ha pasado a ser la actividad más profesionalizada y competitiva.

Es necesario mencionar que esta edición ha sido costeada única y exclusivamente por las diferentes empresas colaboradoras. Para conocer la verdadera esencia del Viernes Mayor hay que vivirlo y acercarse a Pinofranqueado para comprobar la experiencia.