Fundación Mercedes Calles y Carlos Ballestero mantiene un fuerte compromiso con la generación de riqueza y empleo en Cáceres, así como con la dinamización de la ciudad monumental. Precisamente es gracias a esta institución los viajeros pueden tomar fuerzas en el remanso de paz que conforma la plaza renacentista de San Jorge. Ello es posible gracias a la Tapería-Cafetería Jardín de Ulloa, en la que se puede desayunar, tomar el aperitivo, almorzar o solazarse en una cena íntima. Este verdadero templo gastronómico situado en el cogollo de un recinto monumental declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es ya conocido por viajeros, vecinos y foráneos como un espacio para disfrutar de la mejor restauración con una relación calidad-precio que sorprende. Además, la carta se va renovando a lo largo del año, con interesantes propuestas culinarias genuinamente extremeñas.

Muchos son los que acuden a conocer el Jardín de Ulloa, al que se accede ingresando en la tapería, un espacio romántico desde el que se contempla la Montaña donde se encuentra la patrona homónima de la ciudad. Las vistas tanto de día como de noche son espectaculares.

Gracias a Tapería-Cafetería Jardín de Ulloa se ha dotado de un gran aliciente y contenido la ciudad monumental de Cáceres. Pero la Fundación Mercedes Calles y Carlos Ballestero tiene su sede física en ese mismo recinto, en el palacio de los Becerra, un gran ejemplo de arquitectura civil cacereña de la edad media. A lo largo del año acoge exposiciones del máximo nivel que también constituyen un factor de atracción y de dinamización económica con la ciudad.

Actualmente, alberga la muestra ‘Picasso. Sueños Grabados’, con un centenar de trabajos de la obra gráfica del artista malagueño.