Sencilla pero sabrosa. Así es la gastronomía del Valle del Ambroz, todo un descubrimiento para los sentidos. Sabores de la tierra como las cerezas, las castañas o las patatas marcan una forma de cocinar que nos habla de antiguos fogones, del mimo que las abuelas ponían en todo lo que hacían, de materias primas sencillas y naturales que dan a los platos un sabor inconfundible y único. La gastronomía del Valle del Ambroz es un viaje por exquisitos guisos de castañas con ´migajones´ o calderetas de cabritos y corderos, junto con morcillas humeantes y deliciosas.
El Valle del Ambroz tiene, además, su repostería propia con reminiscencias sefardís, con el muédago y el hornazo como principales exponentes. Todos los alimentos de Extremadura tienen su representación en la cocina del valle.
Muy renombrado es el pimentón de Aldeanueva del Camino secado con humo, empleado en los derivados del cerdo ibérico tan típicos de las fábricas locales. La ternera, los pimientos asados, también llamados ´zorongollo´, los platos elaborados con setas gozan de gran fama. Vino de pitarra y aceite de oliva virgen de la zona son imprescindibles para su disfrute.
Los fogones de Abadía, Aldeanueva del Camino, Baños de Montemayor, Casas del Monte, La Garganta, Gargantilla, Hervás y Segura de Toro aglutinan los secretos de una comarca hermosa en cualquier época del año.
Restaurantes, mesones, asadores, campings y hostales repartidos por toda la comarca son los celosos guardianes de estos secretos culinarios que ponen a disposición de un viajero que sabe que en toda la zona encontrará establecimientos de gran confort donde tomar fuerzas. En Hervás puede acercarse a las fábricas de embutidos para adquirir todo tipo de productos curados en los aires serranos. Así podrá llevarse a casa un suculento pedazo del Valle del Ambroz.
Existe, además, un espacio muy especial donde paladearla en su máxima expresión: Hospedería Valle del Ambroz, en Hervás. Si piensa que ya lo ha probado todo en gastronomía puede que ´El Convento´ --que así se llama su restaurante-- le sorprenda gratamente. La Red de Hospederías de Extremadura le invita a descubrir los secretos gastronómicos que diferencian a nuestra región del resto.
Este verano la hospedería ha ampliado su capacidad con el salón Los Naranjos, que puede albergar hasta casi 200 comensales. Este espacio se une al propio comedor del restaurante y al coqueto claustro para grupos reducidos. En la carta de ´El Convento´ destaca la paletilla de cabrito, que se cocina al vacío durante 5 horas a 75 grados para darle solo un golpe fuerte de horno cuando la solicita el cliente. Queda muy jugosa por dentro y muy crujiente por fuera. No menos interesante es el solomillo de cerdo con puré de cremoso de trufa y salsa de setas. El rabo de toro se hace en este templo gastronómico relleno con Torta del Casar. También queda crujiente por en su exterior, pero con el queso con denominación de origen derretido en sus entrañas. El pescado más empleado es el bacalao, que actualmente aparece en la carta con unos tallarines de calamares, con una salsa agridulce de naranja. Durante la representación de ´Los Conversos´ se hizo una receta distinta y específica.
La Hospedería --que prevé incorporar cinco habitaciones más-- se encuentra en un antiguo convento de Trinitarios del siglo XVII, rehabilitado como hotel de lujo de cuatro estrellas con todas comodidades imaginables. Las habitaciones tienen vistas a Hervás, un destino de turismo rural perfecto, cerca de balnearios de gran prestigio, árboles singulares, la Vía de la Plata, y miradores donde extasiarse.
www.valledelambroz.orgwww.hospederiasdeextremadura.es
