La diversidad de paisajes hace de la comarca Miajadas-Trujillo un lugar ideal para el emergente turismo de interior por el abanico de actividades que se pueden ofrecer. Esta diversidad es extrapolable a la distintos usos del suelo que transmiten la misma sensación de cambio en un atractivo abanico de ofertas de productos que nos regalan estas tierras.

Desde las zonas de bosques de montaña de Garciaz, hasta las fértiles tierras de regadío del sur abrazadas por el Guadiana, pasando por interminables dehesas o productivos campos de pastos y cereal, esta comarca brinda una casi infinita posibilidad de recursos que con el buen hacer de sus gentes se transforman en productos agroalimentarios de calidad, hechos con mimo y profesionalidad para satisfacer a todo aquel que sabe apreciar los sabores auténticos.

Esta tierra y sus gentes están sabiendo poner en el mercado un conjunto de alimentos para que desde la diaria y deliciosa rutina de alimentar cada hogar hasta los más exigentes restauradores puedan cubrir expectativas y no verse decepcionados en ningún caso. Productos de la cesta diaria o ´delicatessen´ tienen cabida en el sector empresarial de esta comarca. En el amplio espectro que va desde las grandes industrias transformadoras como las fabricas de tomates de Miajadas hasta las pequeñas empresas familiares de envasado de productos silvestres tienen representación todas las posibilidades empresariales, pero siempre desembocando en productos de calidad transformados de las excepcionales materias primas endógenas.

Las industrias cárnicas de la zona han sabido unir la tradición con las carnes de primera calidad y un esmerado control sanitario y de calidad. Carnes frescas, embutidos o jamones están avalados en algunos casos con marcas de calidad como ternera de Extremadura o Corderex. Estas empresas han sabido modernizarse adaptándose a las más altas exigencias de calidad y al conjunto de normativas vigentes.

Igualmente el sector vitivinícola tiene en la comarca una larga tradición que al igual que lo sucedido con el sector cárnico, ha evolucionado adaptándose a las exigencias del mercado y parte de sus caldo se encuentran bajo el paraguas de la Denominación de origen Ribera del Guadiana. Vinos blancos, rosados o tintos, tanto jóvenes como de crianza. Son vinos amplios, suaves, agradablemente cálidos y de moderada acidez. Poseen aromas muy particulares lo que les confiere un atractivo sello distintivo.

En cuanto a quesos, la Denominación de Origen Quesos de Ibores aporta al mercado una amplia gama de envidiable calidad. La tradición artesana en su elaboración hace de estos quesos piezas únicas. Igualmente la adaptación a los modernos procesos de producción hace que la materia prima este siempre bajo el control sanitario en cada explotación.

UN MUESTRARIO DE PRODUCTOS Pero no podemos acabar este rápido repaso gastronómico sin mencionar otros productos como aceites, fundamentalmente de oliva, con un excepcional sabor y una calidad acorde con el resto de producciones antes mencionadas, productos silvestres como cardillos o criadillas perfectamente envasados para llegar directamente a las mesas, productos hortofrutícolas frescos, arroces, tradición hecha repostería, con insuperable calidad en dulces, helados biológicos elaborados artesanalmente que ofrecen un gama de sabores tan amplia como la imaginación de sus consumidores. En definitiva y sin duda una verdadero muestrario de productos que poner en la carta de cualquier enamorado de la tradición y la calidad.