la caza es un sector que mueve anualmente en Extremadura 385 millones de euros. En este negocio, las monterías significan 76 millones y la caza menor unos 69 millones de euros. Sin embargo, la nueva temporada arroja muchas dudas para los aficionados, pues los problemas para liebres, conejos y tórtolas se recrudecen. Tanto es así que la Federación Extremeña de Caza (Fedexcaza) ha reclamado ayudas urgentes para el rebrote de mixomatosis en la liebre. El presidente de Fedexcaza analiza los pormenores de la temporada que comienza.

-La Asamblea de Extremadura aprobó este año la modificación de la Ley de Caza extremeña, que busca la simplificación e incluye dos tipos, uno para caza mayor y otra para menor ¿Cómo ha sido recibido este cambio normativo por los aficionados?

-Ha sido muy bien recibido. El cazador puede solicitar la licencia única, que vale para todas las modalidades existentes. Puede abonar la de caza mayor, con una tasa de 25 euros y para la que existen muchos descuentos (discapacitado, familia numerosa, menor de 30 años, federado…). Si solamente te interesa la caza menor la licencia única tiene una tasa de 10 euros, a la que también se le pueden aplicar todos los esos descuentos. Creo que esta nueva normativa es muy positiva y nos va a arrojar el número exacto de cazadores que hay en la región. También la nueva tarjeta federativa ha tenido una buena acogida para cazar en cotos sociales. Nosotros en la Federación Extremeña de Caza estamos notando ese volumen de nuevos federados. Lo que se espera desde el sector con mucha ansiedad es la reglamentación de la caza de jabalí al salto. Quedaba recogida en la nueva ley pero se aclaraba que se debería regular posteriormente.

-¿Qué previsiones en general barajan para la temporada que estos días comienza?

-Tenemos una gran preocupación por la caza menor, a pesar de que conejos y liebres han criado muy bien, pero las enfermedades los están diezmando hasta llegar a mínimos muy preocupantes. La perdiz, por ser un año seco, ha criado muy mal. La liebre por segundo año consecutivo tiene un brote importante de mixomatosis, que tradicionalmente padecía el conejo. Y el conejo a pesar de haber criado bien donde había, presenta un alto índice de mortalidad en los meses de septiembre y octubre por la enfermedad vírica.

-¿Cuáles son las especies más abatidas en caza mayor?

-Ciervos y jabalíes marcan la temporada. El propio informe de la caza que la Federación Extremeña realiza anualmente deja patente que existe una tendencia al alza, aunque no sea muy fuerte. Creemos que los resultados serán semejantes a los de la pasada temporada, pero con una reducción de la calidad que sí que es preocupante. De cara a la temporada de caza mayor hay que hacer un aprovechamiento sostenible y racional para ‘no matar a la gallina de los huevos de oro’”.

-¿Cuál es la situación de la tuberculosis en la actualidad?

-En ciervo su presencia es prácticamente insignificante, y en el jabalí sí hay una alta tasa de incidencia, por lo que modalidades como jabalí al salto para su control en zonas agrícolas y ganaderas son necesarias que se regulen cuanto antes para quitar la especie de zonas donde no pinta nada.

-La presión social sobre los cazadores continúa…

-Creo que en Extremadura al respecto se ha dado un vuelco importante en los últimos dos años. Así desde el punto de vista de la comunicación estamos muy presentes y se nos apoya mucho. Quizá falta apoyo institucional o político, que tras las últimas elecciones ha dado un giro de 180 grados. La mayor parte de los grupos parlamentarios apoya la actividad cinegética con hechos concretos. En Extremadura, el acoso animalista prácticamente es insignificante y lo que más nos preocupa es a escala nacional. La caza en países como Francia o Alemania es muy importante e incluso los cazadores están presentes en los desfiles populares. Hay que intensificar el trabajo comunicativo para transmitir a la opinión pública lo que la caza hace. Estamos llegando a los niños para que conozcan nuestra actividad de manera objetiva. Tenemos motivos para ser optimistas. La cantera continúa gracias a la labor de Juvenex y Jocaex, entre otras. La federación extremeña formó a más de mil jóvenes el año pasado para ser cazadores, ciento cincuenta más que el año anterior.