Presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura desde el pasado mes de julio, Florentino Tienza Villalobos muestra en esta entrevista su firme creencia en el cooperativismo. No en vano, la entidad que preside es la federación de las cooperativas extremeñas, que aglutina más de 230 cooperativas de la región, que dan empleo a más de 1.400 personas, representan a alrededor de 45.000 agricultores y ganaderos y facturaron más de 933 millones de euros en 2012.

--Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura arroja unas importantes cifras en un sector estratégico en la economía regional, ¿en qué proyectos está trabajando Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura?

--Hemos puesto en marcha un servicio de auditoría en las instalaciones de carburantes en las cooperativas; estamos desarrollando desde hace años un servicio de asesoramiento a las explotaciones; hemos firmado un convenio para la optimización del consumo eléctrico en las cooperativas; hemos coordinando la campaña oficial contra la pudenta del arroz; estamos desarrollando un fuerte plan de formación y capacitación de agricultores, ganaderos y trabajadores de cooperativas; hemos puesto en marcha la segunda edición de un concurso gastronómico para potenciar los productos de las cooperativas en el sector de la restauración; trabajamos en la reforma de la ley de sociedades cooperativas de Extremadura; e infinidad de proyectos más, siempre con el objetivo claro de representar y defender los intereses de nuestras cooperativas socias.

--¿Cuál es el papel de las cooperativas? ¿Qué han aportado al campo extremeño?

--Las cooperativas agroalimentarias tienen una importancia tremenda desde el punto de vista social y económico. Vertebran la región y son la única empresa que existe en muchos pueblos, han modernizado el sector, están tirando económicamente de Extremadura en estos momentos difíciles, tienen un fuerte compromiso con las zonas rurales y con el medio ambiente, han mejorado la vida de agricultores y ganaderos, garantizando su renta, han favorecido la incorporación de jóvenes al campo y reducen los intermediarios en la cadena alimentaria. En definitiva las cooperativas han hecho que el sector agroalimentario sea el primer sector económico de nuestra región, de España y de Europa.

--¿Hacia dónde debe caminar entonces el cooperativismo en Extremadura?

--A potenciar la calidad que ya tenemos y a aumentar la competitividad. Tenemos las materias, podemos garantizar la trazabilidad y la seguridad alimentaria que el consumidor demanda cada vez más, contamos con productos de una alta calidad... Sólo nos queda apostar por ello y avanzar en la comercialización de nuestros productos, que gozan ya de esa calidad, para quedarnos con el valor añadido, y crecer, tener mayor tamaño y ser más competitivos.

--¿Cuáles son los retos actualmente del cooperativismo?

--Por un lado, comercializar más. Es un reto que ya está prácticamente superado. Hace años tuvimos como reto transformar las materias primas con las que contamos. Y lo conseguimos. Las cooperativas son ya empresas agroalimentarias que transforman esa materia prima en productos igualmente de una calidad excepcional. Estamos ya en la camino de ese reto de comercializar y salir al mercado directamente. Hay innumerables cooperativas que exportan sus productos y otras que están además innovando con ellos: el licopeno, el fiambre de cordero, nuevos envases para el vino o la venta de productos ibéricos ya loncheados, entre otros. Y un segundo reto muy importante es la intercooperación para así tener mayor tamaño y, con ello, ser más competitivos.