--¿Cree en la frase "la unión hace la fuerza"?

--Sin lugar a dudas. Es la clave para las cooperativas, que unamos esfuerzos para afrontar los nuevos retos, tal y como hemos hecho siempre. Eso nos ha permitido no limitarnos a producir materias primas agrarias, sino que nos hemos incorporado a los últimos eslabones de la cadena y vendemos excepcionales alimentos listos para ser consumidos. Con la ventaja, además, de quedarnos con ese valor añadido y de revertir todo nuestro esfuerzo en Extremadura, porque las cooperativas creamos empleo, vertebramos el territorio y fijamos la población rural.

--¿Cuál es el peso del sistema cooperativo en la economía de la región?

--Además de desarrollo, empleo y modernización, el sector agroalimentario extremeño apuesta por la integración, que como sabemos es el principio de economía de escala, y el sector cooperativo, con Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura a la cabeza, ha fomentado siempre la intercooperación para aprovechar sinergias y oportunidades, crecer y tener una buena posición en el mercado. Como muestra de ese peso en la economía, decir que Extremadura es la sexta comunidad autónoma con mayor peso en el cooperativismo agrario español, en función del volumen de facturación y la quinta con mayor número de cooperativas, representando casi el 4% empleo cooperativo de España.

--¿Cuál es la tendencia del sector cooperativo extremeño actualmente?

--Quedarnos con el valor añadido de nuestros productos es el objetivo al que estamos tendiendo. Las cooperativas lo saben y cada vez más nos lo estamos creyendo. Podemos hacerlo y se están dando pasos para ello. Tenemos que ser más competitivos y más fuertes. Y ahí la clave para las cooperativas está en intercooperar. En unir esfuerzos y así poder afrontar los nuevos retos que se nos presentan.

--Habla de valor añadido-

--Porque Extremadura se queda con todo el valor añadido en el sentido de que las cooperativas cuidan el medio ambiente, generan empleo, contribuyen al desarrollo de nuestros pueblos y fijan la población rural. Además, el valor añadido de estos productos viene dado precisamente porque son producidos por las cooperativas agroalimentarias extremeñas, que están asentadas en el medio rural y que aportan desarrollo, empleo, riqueza y modernización al territorio.