Hace 25 años, en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias, el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco nombró Patrimonio de la Humanidad el real monasterio y la basílica de Santa María de Guadalupe y el legado romano de Mérida.

El real monasterio y la basílica de Santa María de Guadalupe son los elementos número 665 del listado de monumentos patrimonio de la humanidad. En el caso guadalupense, de la decena de reglas que los expertos aplican para decidir la declaración de un bien como patrimonio de la humanidad, se aplicaron los criterios cuarto y sexto para su declaración, por ser, según el parámetro cuarto, “un ejemplo sobresaliente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico o tecnológico o paisaje que ilustra etapas significativas en la historia humana”. Y “estar directa o tangiblemente asociado con eventos o tradiciones vivas, con ideas, o con creencias, con obras artísticas y literarias de destacada importancia universal”, según recoge el criterio número seis.

HECHOS HISTÓRICOS. Para la Unesco, “este monasterio posee un interés excepcional porque ilustra cuatro siglos de arquitectura religiosa española y recuerda los dos acontecimientos históricos trascendentales de 1492: el final de la reconquista en la Península Ibérica por los Reyes Católicos y la llegada de Cristóbal Colón a América. La célebre estatua de la Virgen de Guadalupe se convirtió en un poderoso símbolo de la cristianización de gran parte del Nuevo Mundo”.

Los restos arqueológicos de Mérida también fueron declarados Patrimonio de la Humanidad en aquella reunión de 1993 celebrada en Colombia. La riqueza romana emeritense ocupa el puesto número 664 del índice catalogado por la Unesco y los expertos, en este caso, aplicaron los criterios cuarto, como en Guadalupe, y tercero: “El conjunto arqueológico de Mérida es un ejemplo notable de una ciudad romana construida de acuerdo con todas las reglas de diseño urbano romano. Mérida conserva una arquitectura que refleja su antiguo papel como capital en épocas romanas y posteriores”.

La Unesco detalla de la capital regional “los orígenes de la ciudad extremeña de Mérida se remontan al año 25 a.C., cuando Augusto, al final de su campaña en Hispania, fundó la colonia Emérita Augusta, que más tarde se convertiría en capital de la provincia romana de Lusitania. Los vestigios de la ciudad romana antigua, completos y bien conservados, comprenden un gran puente sobre el río Guadiana, un anfiteatro, un teatro, un amplio circo y un extraordinario sistema de abastecimiento de agua. Este conjunto arqueológico ofrece un excelente ejemplo de lo que fue la capital de una provincia romana en la época imperial”.

Cáceres, Guadalupe y Mérida no son, sin embargo, las únicos bienes extremeños declarados Patrimonio de la Humanidad. Junto a estos tres enclaves coexisten en el catálogo de la Unesco la Reserva de la Biosfera y el Parque Nacional de Monfragüe, la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Tajo Internacional y el Geoparque Mundial Villuercas - Ibores - Jara.

RED DE CIUDADES. Con Guadalupe y Mérida, también celebra su vigésimo quinto aniversario la asociación de Ciudades Patrimonio de la Humanidad, entre las que se encuentra como socia fundadora Cáceres, declarada como tal por la Unesco en el año 1986.

La asociación de ciudades ha preparado un dilatado programa de actividades que se desarrollará a lo largo de 2018 y que viene a completar la agenda europea de actuaciones relacionadas con la celebración del Año Europeo del Patrimonio Cultural. Además de actividades deportivas y culturales, el grupo de Ciudades Patrimonio de la humanidad también va a desarrollar acciones autopromocionales.

Además de la presentación oficial del programa en la edición de Fitur del pasado mes de enero, la asociación estará presente en las ferias de Utrech, Bruselas, Hamburgo, París, Berlín, Lisboa, Londres, Singapur, Tokio y Buenos Aires. Al mismo tiempo, realizará acciones comerciales e institucionales en ciudades como Moscú, Amsterdam, París, Berlín, Chicago, Oporto y Milán.

La gastronomía de estas quince ciudades será plasmada en una guía que unirá patrimonio y arte culinario original de cada uno de los territorios que componen la red.

El broche de oro será el concierto simultáneo que tendrá lugar en las quince ciudades el próximo día 15 de septiembre, al tiempo que se celebrarán actividades lúdicas que llamarán a la participación ciudadana. La noche del 15 de septiembre, determinados espacios monumentales abrirán de forma excepcional sus puertas durante la madrugada para celebrar talleres, jornadas, lecturas y recitales.

CONCIERTOS. Esa misma noche, en una de las fachadas emblemáticas de cada una de estas quince ciudades se proyectará la producción audiovisual del colectivo Boamistura “Laberintos Líricos”. Se trata, en definitiva de crear un nexo común entre estas quince ciudades utilizando para ello la danza el teatro o la música cuidando siempre la calidad, la contemporaneidad y la integración del espectáculo en el espacio patrimonial.

El grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad fue creado en España por Cáceres, Ávila, Salamanca, Santiago de Compostela, Segovia y Toledo. A este sexteto inicial se fueron uniendo las demás ciudades hasta alcanzar la quincena de urbes españolas que conforman esta asociación.

España es el tercer país del mundo por número de inscripciones en el catálogo de bienes Patrimonio de la Humanidad. En total, en territorio español existen cuarenta y seis bienes inscritos en el catálogo de la Unesco.