"Queremos estar en vanguardia de la producción alimentaria"

--SIAL es actualmente el mayor escaparate de productos de alimentación, no sólo de la Unión Europea, sino del mundo entero. Es una feria que conocemos muy bien y que concentra a muchísimos importadores. Este año nos acompañan 23 empresas con algunas singularidades. Por vez primera acude con nosotros el Instituto Tecnológico Agroalimentario de Extremadura (Intaex). Ha querido estar junto a las empresas, puesto que SIAL ha tomado una deriva por la innovación y la tecnología de los alimentos muy importante y queremos estar en esa vanguardia. Así, por ejemplo, aquí tenemos el aceite con licopeno, que es una patente extremeña nacida en la Universidad de Extremadura, desarrollada por una cooperativa de tomates de la región y que ya hoy está teniendo una aceptación impresionante. La planta que lo fabrica fue inaugurada en julio. Tenemos también un producto muy concreto y también desarrollado por el Intaex que sustituye la grasa animal de las Tortas del Casar y Quesos de la Serena por grasa vegetal, bien de aceite de oliva o de nuez, con una textura deliciosa y especialmente indicado para aquellas personas que no puedan ingerir grasas animales. También hay demanda por parte de empresas valencianas para elaborados como las horchatas.

Otra singularidad es que traemos una empresa de logística. Este sector se va a convertir pronto en un negocio en Extremadura, porque habrá una plataforma encargada de realizar toda la distribución de las empresas de la región. Ese nicho de mercado debe tener notoriedad. Se trata de una empresa con experiencia en poner cualquier producto en cualquier lugar del mundo con costes competitivos y en las condiciones necesarias.

Hay otra empresa presente que se dedica a dar servicio a exportadoras que por su tamaño no pueden contar con un departamento específico. Estos servicios hasta ahora casi en su totalidad los venía dando la Junta de Extremadura. Si queremos llegar a que el 15% del PIB se derive del comercio exterior es necesario que existan empresas de este tipo. Van a sentar un precedente porque nuestros productos deben ir ya en un paquete con los servicios y la logística para que estén en tiempo y forma en cualquier mercado del mundo.

--En una feria tan grande como Sial cómo se defienden los productos extremeños frente a otros países que son más agresivos a la hora de vender?

--Hay dos cuestiones fundamentales, una de ellas es que estamos rodeados por comunidades muy potentes. Sin embargo, hemos tenido un estand magnífico muy nítido, con una imagen muy limpia la el que el producto se hace notar como nunca. Eso es lo que hemos hecho en los últimos años: cambiar nuestra imagen de nuestra presencia fuera bajo la marca de ´Alimentos de Extremadura´. El trabajo más importante de una feria es la agenda que se tiene que hacer antes y después. A cada empresa se le gestiona una agenda para que todas las horas que esté en la feria tenga visita de importadores interesados. Para eso ponemos a funcionar a toda nuestra gente en las Oficinas Comerciales de Extremadura. Posteriormente, se hace una valoración y seguimiento de lo que ha dado de sí.

--¿Cuál ha sido su balance según experiencias anteriores?

--Cuando se acaba la feria incluso se lleva a hacer visita a grandes superficies y establecimientos más selectos para ver cómo se posicionan los productos en los lineales. Eso da una idea de cómo tienes que competir en el mercado y de si los precios son competitivos o no. En ese sentido, lo más importante es trabajar la agenda y que ellos participen. La Junta de Extremadura tiene que realizar una labor de generar iniciativas. Pero después las empresas tienen que explicar cómo producen. Vamos a hacer en Brasil una campaña de Alimentos de Extremadura. También se va a hacer en Alemania y en Austria. Aquí se aprovechan todas las oportunidades, pero las empresas tienen que ser constantes con el mantenimiento de esa agenda.

--¿Qué asuntos ha tratado estos días en SIAL con las diferentes visitas al estand extremeño?

--He estado con dos consejeros, con el Comercial y con el de Agricultura de la Embajada de España, a quienes hemos puesto en contacto con las empresas participantes. Queremos que ellos vean cómo la innovación y los productos de calidad, el buen hacer, la trazabilidad y el respeto a la naturaleza son nuestras características. Al fin y al cabo, los que se quedan aquí son ellos, que tienen que abrir muchas puertas.

--¿Una vez terminada la feria cuál es la siguiente fase de trabajo?

--Eso ya está todo recogido en el Plan de Internacionalización del Comercio Exterior y ahora en la Estrategia Internacional para el Comercio en Extremadura, que no solo abarca el comercio exterior. Tenemos que preparar nuestros recursos humanos, gente que sepa de mercados de referencia. No es lo mismo China, que Francia, México o Estados Unidos. No puedes tener un mercado global para un producto, sino que tienes que posicionarte en aquellos donde éste sea más receptivo. Por ejemplo, en Fruit Atracción vamos a anunciar que la ciruela de Extremadura se va a exportar a México. Eso ha costado 6 años de trabajo, desde que fui a Fruit Logística en Berlín. El sector me puso esa demanda sobre la mesa: la exportación de fruta de hueso a México. Nos lo propusimos como un reto. Aprovechamos para montar una agenda con todos los que estaban del gobierno mexicano. De esa agenda salió una visita a México con el secretario de Estado de Agricultura. Tras mucho trabajo, nos notificaron que se nos abren las puertas de la exportación de ciruela. México es el mayor consumidor de esta fruta del mundo.

El año pasado exportamos a Brasil 800 contenedores de fruta, uno de los principales productores. Lo hacemos porque tenemos un valor añadido: calidad, trazabilidad, innovación y tecnología para poner la fruta en buenas condiciones en el mercado.