San Martín de Trevejo, entre la Sierra de Gata y la frontera con Salamanca y Portugal, a los pies del Jálama, es una de las interesantes propuestas para visitar en el norte de la región. Pocas poblaciones aúnan una oferta más completa de naturaleza, patrimonio, calles con sabor medieval y una gastronomía de primer orden. No en vano goza de la categoría de Conjunto Histórico-Artístico. Para conocer a fondo el pueblo, lo mejor es dejar aparcado el coche y recorrerlo a pie, asombrándose con sus fachadas de muros de piedra en casas, por lo general, de dos alturas. En algunos casos, salen a la calle unas vigas de madera para sujetar la casa que están rematadas semejando una cara, conocidas como ‘tozones’. Las fachadas están decoradas con macetas, lo que añade aun más colorido a la estampa. Las plantas bajas se conocen como ‘boigas’ y servían antaño para cobijar el cerdo. Actualmente, las casas están muy cuidadas por sus dueños y son perfectas para disfrutar del vino de la tierra y los embutidos y quesos de la zona. En general, por todo el recinto se pueden encontrar casas-palacio de gran belleza.
No pueden dejarse sin visitar la Iglesia de San Martín de Tours y el Monasterio de San Miguel -fundado por san Francisco de Asís- así como la plaza Mayor, con soportales de madera y pilares graníticos, y el ‘Pilón’ de agua potable en el centro de la misma, construido en el año 1888. Este municipio ha estado aislado durante muchos años, situación que le ha proporcionado un estilo propio en su arquitectura y la conservación de un dialecto propio, A Fala, declarado Bien de Interés Cultural. Las calles se caracterizan por las escaleras y poyos para acceder a la vivienda, así como por regatosLa lengua, una mezcla de vocablos galaico-portugueses ha seguido vigente hasta nuestros días gracias al aislamiento que este rincón serragatino ha tenido a lo largo de su historia.
Dicha localidad es una de las nuevas incorporaciones a la red de Los Pueblos más bonitos de España tras superar la auditoría a la que se han sometido los aspirantes.El resto de nuevas incorporaciones son Bonilla de la Sierra (Ávila), Níjar (Almería), Roda de Isábena (Huesca), Bagergue (Lérida), Potes (Cantabria), Tazones (Asturias), Carmona (Cantabria), Viniegra de Arriba (La Rioja), Viniegra de Abajo (La Rioja) y Setenil de las Bodegas (Cádiz).
