Junto a las medidas de carácter económico y financiero aprobadas por el Gobierno y las diferentes administraciones, bancos y entidades financieras también se han volcado en impulsar medidas para combatir los efectos económicos de la crisis provocada por el covid-19 y la paralización de la actividad debido a la declaración del estado de alarma, poniendo en marcha iniciativas de apoyo para ayudar a sus clientes. Por este motivo, el papel del sector financiero es clave en esta fase de reconstrucción y reactivación de la actividad económica.

Así, y además de ser protagonistas y colaboradores necesarios en medidas aprobadas, algunas de las que se han llevado a cabo son el aplazamiento de impuestos para pymes, facilitar el acceso a la liquidez por parte de las empresas y autónomos, incluyendo moratorias hipotecarias y en el pago de alquiler; los avales ICO para financiar a las empresas pymes y autónomos; suspensión de comisiones y ampliación en los límites de las tarjetas de crédito; planes de contingencia para proteger a emprendedores, clientes y proveedores se suman a las medidas de carácter estrictamente económico.

También se incluye el adelanto de las pensiones y las prestaciones por desempleo a los parados o a las personas en situación de ERTE; ventajas, apoyos o condiciones exclusivas para determinados clientes y colectivos.

Todo ello complementado con el impulso de sus canales digitales. Conscientes de la importancia del sistema financiero y de su contribución para reactivar la actividad económica.

El Periódico Extremadura analiza medidas y entidades financieras que operan en la provincia; así como las principales demandas del tejido empresarial extremeño.