Las familias españolas optan cada vez más por el servicio de la cremación a la hora de despedir a un ser querido y por ello, las empresas funerarias han realizado en los últimos 20 años una gran inversión para poder satisfacer esta necesidad de las familias.

Según Juan Vicente Sánchez-Araña, presidente de Panasef (Asociación Nacional de Servicios Funerarios), “la inversión de las empresas funerarias en este sentido ronda los 800 millones de euros. Los cambios en la sociedad española están provocando el aumento considerable de las cremaciones y las empresas hemos tenido que adaptarnos a esta tendencia”.

Todos estos datos se extraen de un informe elaborado por Panasef sobre las instalaciones de hornos crematorios existentes en España. Un documento en el que, por primera vez, se extraen datos sobre esta cuestión y que está disponible a todos en www.panasef.com

Asimismo, en el entorno del XIII Congreso Nacional de Panasef que se celebró en Bilbao el pasado mes de mayo, Juan Vicente Sánchez-Araña ha destacado la importancia de tener una normativa nacional referente a la emisión de contaminantes por parte de los hornos crematorios. “Hemos solicitado a las administraciones públicas una legislación, alineada con Europa, que aúne los criterios en todas las comunidades autónomas referentes a la emisión de contaminantes. Además, consideramos necesario que la administración establezca unos plazos de adaptación de manera que el sector tenga el tiempo suficiente para ajustar sus hornos crematorios a esa posible nueva legislación. Todos tenemos que implicarnos en la protección a la atmósfera y en ser lo más escrupuloso posible en el cumplimiento de la legislación vigente”, comenta Juan Vicente Sánchez-Araña.

En el País Vasco existen actualmente 22 hornos crematorios. Si el número de fallecidos en esta comunidad durante el año 2014 fue de 20.165 personas, podemos extraer el dato de que hay un horno crematorio por cada 917 fallecidos.

Guipúzcoa, con 10 hornos crematorios, es la provincia del País Vasco con mayor número de hornos crematorios. Le sigue Vizcaya con 8 hornos y Álava, con 4.

Extremadura cuenta con siete hornos crematorios. En 2014 fallecieron 10.751 personas, de las que se incineraron 1.536, según los datos aportados por la patronal.

DATOS. En el año 2015, según el Instituto Nacional de Estadísticas, fallecieron en España 422. 276 personas, 212.132 hombres y 209.144 mujeres, un 6,7% más que en el año anterior. Este dato supone el mayor número de fallecimientos en España desde que existen datos oficiales al respecto. Sin embargo, durante los primeros meses del 2016, el número de fallecidos ha descendido considerablemente. Según Juan Vicente Sánchez-Araña, presidente de Panasef, “el aumento de fallecimientos durante el año 2015 ha sido desde nuestro punto de vista algo coyuntural. No creemos que sea una tendencia en los próximos años ya que, durante el primer semestre de 2016, hemos constatado como el número de servicios funerarios ha descendido. Por tanto, creemos que este año los fallecimientos en España se volverán a situar en torno a los 395.000 o 400.000”. En Extremadura en 2014 fallecieron 10.799 personas y en 2015 fueron 11.495. La tasa bruta de mortalidad también aumentó el año pasado. Así, durante el 2015 se situó en el 9,1‰ frente a un 8,5‰ del 2014.