Unidad, cooperativismo, excelencia y competitividad. Estas son algunas de las claves del futuro del sector ovino en Extremadura, según indicó ayer Guillermo Fernández Vara durante la inauguración del XV Salón Ovino de la Serena, en Castuera. El presidente hacía esta afirmación con la mirada puesta en la reunión que hoy al mediodía mantendrá el consejero de Agricultura y Medio Rural, con las cooperativas del sector. "El futuro no está en la atomización", dijo.

El cooperativismo fue uno de los ejes de la intervención de Vara, quien afirmó que el 88% de los censos de carne de La Serena está adscrito a cooperativas. Este dato, junto con el hecho de que el 29% del censo del ovino de carne se concentra en Extremadura y con perspectivas de crecimiento, dibuja un interesante panorama para un sector que ha visto por fin estabilizarse los precios en origen.

El presidente subrayó como reto del sector la penetración en nuevos mercados sin miedo a la competencia. Por ello animó a prepararse de cara a la nueva PAC, en 2013, que será el resultado de 27 realidades distintas, tras la incorporación a la Unión Europea de una docena de nuevos países.

Según afirmó el presidente, si no se toman decisiones correctas en favor del modelo de sostenibilidad rural se pueden producir grandes concentraciones urbanas --donde crece el empleo en torno al sector servicios-- pero que son un modelo de crecimiento que ya no es válido.

Por su parte, el secretario de Estado de Medio Rural y Marino, Josep Puxeu, destacó los logros conseguidos en los últimos 25 años por parte de quienes percibieron la calidad y la importancia de los productos derivados del ovino. "En este sector está todo por hacer. Castuera no está lejos en el mapa", afirmó.

Asimismo, subrayó el apoyo del Gobierno y de la Unión Europea a un sector estratégico como el agroalimentario, "que garantiza el abastecimiento y permite mejorar la competitividad y la exportación", comentó.

PROYECTOS Por su parte, el alcalde de Castuera, Francisco Martos dijo que estaba muy feliz por celebrar estas bodas de plata del Salón Ovino en primera persona. En cuanto al futuro del mismo, pasa por la construcción de un matadero y la puesta en marcha del centro integral del ovino. El futuro Salón Ovino, a su juicio, debe tener cinco líneas de trabajo, cada una con un color en función de las nuevas temáticas: una azul para la pesca y el turismo; naranja, para las nuevas tecnologías; verde, para energías renovables; rojo, donde la igualdad, el emprendimiento y el comercio sean protagonistas; y blanco, para lo social y lo educativo.