El amplio dominio del motociclismo español en el Mundial 2010 empezó a plasmarse, el pasado domingo, en Sepang (Malasia). Allí, con dos carreras inteligentes, meditadas, sin necesidad de arriesgar inutilmente, dos de los tres pilotos españoles que este año acapararán la triple corona, los tres títulos de las tres categorías en juego (125cc, Moto2 y MotoGP), se convirtieron en nuevos y flamantes campeones del mundo. Jorge Lorenzo heredó, 11 años 11 meses y 14 días después, el cetro de la máxima categoría conquistado, en 1999, por Alex Crivillé; y Toni Elías se convirtió en el primer campeón del mundo de la nueva cilindrada, aquella que sustituye a las viejas dos y medio. Y, a partir de ahí, uno aspira a prolongarse en el tiempo como el mejor y el otro, el chico de Manresa, a dar el salto, de nuevo, a MotoGP donde, posiblemente, no podrá, de momento, pilotar una moto ganadora pero donde sí demostrará la calidad, el coraje, las manos, la habilidad y la sabiduría que han hecho de él, doce años después de su debut en el Mundial, uno de los doce campeones del mundo que posee el motociclismo español.

PIRIPOS DE LOS COLEGAS Los primeros que se inclinaron ante el dominio de los campeones fueron sus colegas. "Jorge (Lorenzo) ha sido veloz en todas las condiciones, en todos los circuitos, en entrenamientos y carrera y, además, no ha cometido un solo error a lo largo de las quince carreras que llevamos disputadas. Es un gran campeón, merecía este título", dijo Valentino Rossi, su compañero de equipo, su máximo rival.

"Creo que es muy importante para España volver a tener un campeón del mundo de la categoría máxima, después del primer título conseguido por Crivillé, en 1999, de eso hace ya mucho tiempo... ¡demasiado!", comentó, en una comunicado oficial, Dani Pedrosa, el piloto que aspira a completar el doblete conquistando el subcampeonato tras recuperarse de su triple fractura en la clavícula izquierda. "Por todo ello, me gustaría felicitar a Jorge Lorenzo por su título, ya que ha hecho una gran temporada, desde el inicio, y ha cometido muy pocos errores, así que se merece este título mundial". Los elogios les llegaron a ambos campeones de todo el mundo.

Los medios de comunicación del mundo entero se hicieron eco ayer de la noticia aunque, en algunos de ellos la conquista de Lorenzo quedó ensombrecida, o reducida, por la reaparición, en lo alto del podio, después de seis meses de ausencia ("a mi me han parecido seis años", dijo Rossi) del Doctor . "Lo grande de este título y lo que, probablemente, lo convierte en irrepetible", explicó Marcos Hirsch, hombre de confianza del ya tricampeón mallorquín, "es que Jorge lo ha ganado ante Rossi, con su misma moto y neumáticos, cosa que no había ocurrido jamás antes".

"El marcaje, la vigilancia, la presión que Rossi, Pedrosa y, a veces, Stoner han ejercido sobre Lorenzo es lo que ha hecho que él se sintiese vivo, atento, durante todo el año", ha comentado Waine Rainey. "Su pilotaje agresivo lo ha convertido en campeón", señaló Kenny Roberts. "Este año ha sido, con mucha diferencia, el mejor", comentó otro excampeón mundial como Eddie Lawson. "Rossi", llegó a comentar Masao Furusawa, máximo responsable de Yamaha en los circuitos y gran defensor de Vale , "detecta los problemas; Lorenzo pilota sobre ellos".

Lorenzo, cuyo segundo apellido es Guerrero, lo que le pega un montón (el segundo apellido de Toni Elías es Justicia), reconoció ayer, aún en Kuala Lumpur, que "no es por alardear pero hubisiese podido pelear por la victoria pero, ante frenadores tan buenos como Rossi y Dovizioso, preferí desistir porque, sin querer, nos hubíesemos podido irnos los tres al suelo intentando frenar más tarde uno que otro".

EL FUTURO DE ELIAS Ese mismo mundo considera prioritario que Elías regrese a MotoGP. "Se merecía ser campeón porque es un campeón", dice Fausto Gresini, su jefe de equipo. "Toni es digno de admirar porque fue lo suficientemente humilde como para dar un paso atrás, descender de categoría, para dar dos pasos hacía delante. Ha ganado el primer año de una categoría donde todas las motos son iguales y eso tiene un mérito brutal".

Elías reconoció ayer a que está convencido "al 99%" de que el año que viene correrá en la categoría reina. "Es un pilotazo y tiene que estar entre nosotros", señaló Lorenzo. "Y lo estaré, sí", añadió el manresano, "pero las motos oficiales ya están cogidas. Solo aspiro a entrar en un buen equipo, que me ofrezca una moto competitiva, con la que poder acercarme a los de cabeza y demostrar mi valía. Y, sobre todo, ganarme el status de piloto oficial para el 2012 cuando, con el cambio de reglamento (vuelven las motos de 990cc) y la entrada de nuevas fábricas, tener la posibilidad de volver a convertirme en piloto oficial".