Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) sumó su primera victoria de la temporada sin apenas oposición de sus rivales en un Gran Premio de Catar de MotoGP que vio el regreso a la primera línea del italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) y el exitoso debut del español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), tercero en el podio de Losail.

No hubo sorpresas en la salida, a pesar de ser Dani Pedrosa (Repsol Honda RC 213 V) un auténtico especialista en ese momento y el campeón del mundo se puso a tirar al frente de un grupo en el que sorprendió la tercera posición del italiano Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici), por delante de su compatriota Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) y con el debutante Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) séptimo en la primera vuelta.

Desde el giro inicial, Lorenzo imprimió un fuerte ritmo que le permitió abrir un ligero hueco respecto a Pedrosa, que se esforzaba por no desengancharse de su rebufo, pero tampoco sin perder de vista al británico Cal Crutchlow (Yamaha YZR M 1), que en varias ocasiones intentó superarlo, mientras que por detrás llegó Marc Márquez dispuesto a todo.

No tardó mucho Márquez en superar a Crutchlow y ponerse tras la estela de su compañero de equipo, en tanto en cuanto el italiano Valentino Rossi comenzó a recuperar terreno después de haber cedido bastante al cometer un error en las primeras vueltas que casi le hace salirse de la pista.

Rossi superó al estadounidense Nicky Hayden, su ex compañero de equipo en Ducati, para ponerse tras la Honda RC 213 V del alemán Stefan Bradl, pero la cabeza de carrera cada vez estaba más lejos de su objetivo de subir al podio.

En apenas cinco vueltas el campeón del mundo de MotoGP en 2010 y 2012 ya contaba con una ventaja de dos segundos sobre Dani Pedrosa, quien arrastraba a sus espaldas a dos rivales incómodos, su propio compañero de equipo y el siempre agresivo Cal Crutchlow, que evidenció no tener una moto al técnicamente al nivel de sus rivales.

En el grupo de atrás, Rossi se esforzó al máximo por intentar doblegar a Stefan Bradl y la resistencia del alemán le hizo perder un tiempo precioso a la hora de "engancharse" a sus rivales de delante, hasta que lo consiguió en el octavo giro y en un intento de mantener su "estatus", el germano acabó por los suelos.

Desde ese momento, Rossi marcó un ritmo sensiblemente inferior al de los pilotos de delante y poco a poco arañó distancia a ritmo de vuelta rápida personal respecto al trío que formaban Pedrosa, Márquez y Crutchlow, pero todos ellos lejos de un claro dominador de la carrera, Jorge Lorenzo.

A seis vueltas del final, Márquez se decidió a adelantar a Pedrosa en la apurada de final de recta para comandar el grupo perseguidor de Lorenzo y apenas unas curvas después Rossi conseguía enlazar con la cola del grupo, en donde marchaba Cal Crutchlow, quien al verse superado por el italiano pisó la zona sucia de la pista y acabó fuera de la misma, aunque volvió quinto.

Rossi ya estaba tras el rebufo de Pedrosa y con Márquez marcando el ritmo en ese trío, con cinco vueltas por delante para intentar superar a sus rivales de Repsol Honda, objetivo que cumplió a tres de la bandera de cuadros y ya sin opción de mejorar más, pues Lorenzo era un sólido líder con más de siete segundos de ventaja.

Dani Pedrosa se quedó en esta ocasión sin la recompensa del podio en la cuarta plaza, por delante de Cal Crutchlow y de Álvaro Bautista (Honda RC 213 V), sexto.

El español Aleix Espargaró (ART) volvió a ser el mejor de los pilotos en la categoría CRT (Claiming Rules Team) después de una apretada pelea con su propio compañero de equipo, el francés Randy de Puniet (ART) y el también español Héctor Barberá (FTR Kawasaki).