Parece que empieza a haber favorito. Parece que ese niño mudito que responde al nombre de Àlex Rins (KTM), barcelonés, y que ya ganó, por partida doble (dos triunfos en menos de 20 minutos, recuerden que no sirvió la primera carrera y se hizo un GP a cinco vueltas), huele a número uno de Moto3. Hoy, en la última sesión, en la definitiva para construir la parrilla de la pequeña cilindrada, ya no tan pequeña, Rins hizo una nueva exhibición, con caída y visita a su box incluida. ¡Ah! y su vuelta rápida la hizo utilizando un neumático usado.

El nuevo pupilo de Emilio Alzamora ha sumado su tercera 'pole' y la segunda, consecutiva, de este año, ya que antes de ganar en Austin también logró encabezar la parrilla de salida. Rins, que agradeció a su equipo "la celeridad y profesionalidad con la que han arreglado mi fallo, pues no tenían mucho tiempo para darme una nueva opción a rodar", logró parar el crono 1.46.66 minutos, 0.485, es decir, casi medio segundo más rápido que el temible y recuperado Maverick Viñales (KTM), que, de nuevo, partía este año como gran favorito al título y 0.667 segundos más veloz que el otro gran candidato señalado por todos, el mallorquín Luis Salom, que ya tiene la KTM oficial que persiguió el pasado año. Pues bien, a los dos buenos-buenos, Rins les superó por medio segundo.