Llegados a este punto, a cuartos de final del Mundial, nadie puede conformarse con lo hecho. Vicente del Bosque, que vive su primera cita mundialista, menos que nadie. "Queremos seguir avanzando sin ponernos límite e intentar que la gente tenga también un buen sabor de boca con nuestro juego. No sólo se trata de ganar, sino cómo se gana", dijo ayer el seleccionador español, que ya había dicho que es consciente de que "cualquier cosa que no sea ganar el Mundial va a saber a poco".

España va a poner todos los medios necesarios para seguir progresando ante un rival que admite su inferioridad técnica, pero que no renuncia al triunfo por otra vía. "No siempre gana el mejor, sino el que juega con mayor corazón e ilusión... A un partido tenemos opciones. En una competición de 20 fechas no tendríamos ninguna", afirmó su técnico, Gerardo Martino.

ANTE TODO, PRUDENCIA También en cuestión de ganas quiere Del Bosque que España sea superior. "Debemos desconfiar de aquellos que se plantan aquí en tono victimista. No debemos hacer vaticinios, sino prepararnos para la dificultad que seguro que vamos a encontrar ante un equipo que también quiere ganar", afirmó el seleccionador, que calificó el choque como "el más importante en la historia de la selección española" sin dejar de esperar "esté por venir después el más importante aún".

Torres, a su juicio, no necesita especial atención para afrontar otro partido con la tensión de saberse centro de muchas miradas críticas. "Esperamos que Fernando nos ayude a ser mejores. Ya ha aportado su fútbol y su esfuerzo para que estemos aya a estas alturas entre los siete mejores del mundo", manifestó Del Bosque, quien explicó la eliminación de Brasil no tiene por qué ser tomada como una lección de humildad "conociendo la realidad del fútbol, a la igualdad que existe y que cualquiera te puede ganar, sobre todo Holanda, que tiene jugadores que juegan en los mismos equipos que los de Brasil y ha hecho una excelente clasificación".