La asociación Cáceres Acoge ya dispone de una sede en la que desarrollar su labor de ayuda y apoyo a la población inmigrante. La consecución del local, situado en las antiguas instalaciones del hogar del pensionista y propiedad de la Junta, ha sido posible tras la reunión mantenida el pasado viernes entre la consejera de Bienestar Social, Leonor Flores, y la delegación local del colectivo.

De esta manera, y después de varios intentos por tener una sede, el colectivo contará con un lugar en el que trabajar y será en las dependencias que hasta ahora, y con motivo de las obras de mejora y ampliación de su edificio, usaba UGT, según confirmó ayer a EL PERIODICO la presidenta de Cáceres Acoge, Fisina Bacas, quien subrayó: "nosotros queremos convivir con todos los demás, pero también tenemos unas necesidades y exigimos un respeto".