Navalmoral ya no contará con un lugar en el que esté autorizada la práctica del botellón . Así de tajante se mostró ayer el alcalde moralo, Rafael Mateos, quien apuntaba que cualquier persona que realice esta práctica dentro del término municipal recibirá una sanción económica y aseguraba que su decisión es "absolutamente firme".

Mateos explicó que había tenido que adoptar esta postura debido a que cada vez son más los actos de vandalismo que se producen en la zona del ferial, lugar donde hace diez meses el equipo de gobierno municipal trasladó el ´botellón´ porque consideraba peligroso que éste se celebrara en las inmediaciones de la piscina municipal, ya que los jóvenes debían acudir hasta allí con un vehículo.

INCUMPLIMIENTO El mandatario moralo aseguró que decidió trasladar esta práctica nocturna de la piscina al recinto ferial después de haber hablado con los jóvenes en dos ocasiones y establecer una serie de normas como la de que debían ubicarse en la zona más alejada de las viviendas, sin embargo afirmó que "no han respetado ni normas, ni a personas, ni al mobiliario" y apuntó "he tenido paciencia más que suficiente".

Del mismo modo lamentó que los jóvenes no hubieran aceptado su consejo de constituirse en asociaciones para que así "el ayuntamiento pudiera tener un interlocutor", y pidió la colaboración de los padres y vecinos en general para que tras esta medida pueda acabarse con la práctica del botellón , aunque aseguró: "Sé que no es fácil".