Representantes de las asociaciones de Ecologistas en Acción y Adenex en Navalmoral de la Mata han querido recordar un año más Fukushima -el peor accidente nuclear de la historia- que hace ahora, justo el 11 de marzo, nueve años desde que sucedió en Japón y que «hoy sigue latente». Así lo expresó el coordinador del grupo de trabajo de Adenex, José María González, que asistió junto a voluntarios y otros miembros de la asociación a los actos organizados para recordar este suceso y, al mismo tiempo, reivindicar el cierre de la central de Almaraz. «Cada día que continúa abierta se generan residuos dañinos y por eso la prioridad es su cierre definitivo», reclamó.
Una reivindicación que han vuelto a poner de manifiesto con la plantación de un nuevo ciruelo, el noveno, en recuerdo a las víctimas de Fukushima. La plantación ha tenido como escenario un terreno público junto a la zona de los Sauces en Navalmoral. Se hizo el sábado, una actividad esta que se complementó con la proyección del cortometraje La fuga radiactiva en el centro de artes escénicas Takatá y que atrajo, además, a ecologistas procedentes de Portugal.
Este cortometraje se posiciona a favor de un cambio de modelo energético basado en las energías renovables y está dirigido por el conquense Eduardo Soto, que también acudió a la proyección en Navalmoral. Se finalizó con un debate en el que se trataron, entre otros temas, la gestión de los residuos nucleares.
