En la tarde del viernes el Patronato de la Fundación Concha homenajeó a la figura de su mecenas, Antonio María Concha y Cano, con motivo del bicentenario de su nacimiento. Estos actos se limitaron a una ofrenda floral con la actuación de la coral Amigos de la Música --que colaboraba desinteresadamente-- y el discurso del presidente del Patronato. A estos actos se unieron una exposición etnográfica que, durante este fin de semana, sólo estará abierta hoy de 11.30 a 13.30 horas, y un concurso fotográfico.
Ante la envergadura del personaje homenajeado y la repercusión que tuvo el paso de éste por Navalmoral, desde varios sectores de la población se considera que estas actividades son por lo menos insuficientes. De hecho --por una u otra razón- numerosos vecinos ni siquiera tenían constancia de la celebración de los actos, por lo que habrá que suponer que la figura de Concha, como señalaban personas allegadas a la fundación, seguirá siendo la gran desconocida.
POLITICO DEMOCRATA
Concha y Cano, de origen placentino, nació el 13 de junio de 1803. Político demócrata y republicano, sus ideas le llevaron a exiliarse al extranjero. Gran amigo de Salmerón y presidente de la Primera República, Antonio Concha obstentó cargos políticos de una gran responsabilidad.
Su clara inclinación hacia una vertiente educativa y cultural le llevaron también a que en su testamento --falleció en octubre de 1.882-- quedara reflejado su propósito de que gran parte de su legado estuviera destinado a la creación de una escuela de párvulos y una biblioteca municipal (Fundación Concha) en Navalmoral, donde Concha acabó sus días. Así en 1885 se abrió una escuela infantil con la pedagogía más avanzada de la época, el sistema froebeliano y montessori, y que serviría de ejemplo.
La biblioteca fue inaugurada en 1898 y cuenta con un importante fondo bibliográfico, compuesto por ejemplares de los siglos XVII, XVIII y XIX. En cuanto a las escuelas del Rollo, fueron inauguradas en 1926, donde se instalaron cuatro aulas de educación infantil. Este edificio ha vuelto en estos días a manos de la fundación, tras estar cedido al Ministerio de Educación.
