Su llegada a la dirección médica del hospital Campo Arañuelo de Navalmoral ha aportado tranquilidad a un puesto que no encontraba un responsable duradero desde hacía algunos años. Jorge Farfán afronta con ilusión este reto lleno de dificultades, como un cambio importante en el sistema informático, la gripe A y ahora la crisis económica.

--El hospital vive este año una efeméride importante. ¿Cómo están yendo los actos?

--Tenemos una comisión de festejos que está trabajando con muchas ganas, sobre todo la gente que ya es histórica en el centro, que tiene deseos de poner por todo lo alto al hospital durante estas bodas de plata.

--Con 25 años, ¿el centro se encuentra en buen estado?

--Está en un buen momento, tiene larga vida todavía. Actualmente vivimos una situación de crisis general y un periodo de acomodación a las circunstancias, que de alguna forma nos limita para poder hacer más.

---¿En qué retos y mejoras trabajan ahora mismo?

--Este año hemos empezado con la prueba de esfuerzo y hemos inaugurado el nuevo gimnasio. Trabajamos en dotar de facultativos las áreas más flojas, por ejemplo se ha aumentado en un 40% la plantilla de oftalmología. Vivimos tiempos de austeridad, pero está garantizada la cartera de servicios y la asistencia a los pacientes en los mismos términos de siempre. Otros proyectos son la educación de los padres en el parto y la información específica de enfermería para diabetes.

--¿Existe en estos momentos algún área hospitalaria en la que falten facultativos?

--En urología están pasando una crisis, no hay urólogos en la bolsa para poder contratar. El problema de los hospitales comarcales es que suelen ser un lugar de paso. En determinadas especialidades se nos mueven los profesionales con mucha frecuencia. Lo demás se encuentra todo cubierto.

--¿El hospital goza de buena imagen entre los ciudadanos?

--En general el concepto es bueno, pero hay que trabajar más en esto. No vamos a comparar ocio con salud, pero vivimos en una población de 20.000 habitantes donde no hay cine, y si queremos verlo tenemos que desplazarnos 60 kilómetros. Claro que no es lo mismo, pero si lo hacemos por ocio, la población puede comprender que no podemos contar con todos los servicios porque no es rentable.