La secretaría del Ayuntamiento de Navalmoral trabaja estos días en la elaboración de un registro oficial de perros. Según ha explicado esta semana el portavoz municipal, José D. Pascual, se va a dividir a la población en Navalmoral en ocho zonas de movilidad para canes. De este modo, en ese futuro registro, los dueños deben indicar la zona habitual de movilidad del perro.

El objetivo de esta iniciativa es conocer la densidad de animales por zonas y determinar así las áreas en las que se colocarán, de forma experimental, dos ´pipi-canes´, unos areneros para que los animales hagan sus necesidades. Al respecto de esta futura medida, Pascual reconoció que no todos los miembros del equipo de gobierno están de acuerdo con esta medida ya que algunos consideran que no van a ser utilizados. El problema de los excrementos de perros es habitual en Navalmoral. De hecho, durante un año ha habido personal trabajando para vigilar que los dueños de animales domésticos recogieran sus excrementos. Si en la calle principal suele estar limpia de este tipo de suciedad, no ocurre lo mismo en otras zonas del municipio. Por otro lado, hace unos años se colocaron varias papeleras con expendedores de bolsas para recoger los excrementos que no tuvieron mucho éxito.