Los vendedores ambulantes, que visitan cada viernes Navalmoral para vender sus productos en el mercadillo, deberán presentar dentro de pocas semanas, en la jefatura de la Policía Local, la documentación necesaria --licencia fiscal, carnet de manipulador de alimentos, (para los puestos de alimentación), y carnet profesional de vendedor ambulante-- para que puedan seguir regentando sus negocios semanalmente.

Según manifestaron fuentes de la Policía Local, además de esta medida, "cada tenderete tiene su expediente y, dentro de poco tiempo, los ambulantes deberán llevar puestos, de forma visible un carnet en el que se especifique el tipo de producto que vende y los datos fiscales del propietario".

VENTA ILEGAL

Con esta medida, se pretende controlar la venta ilegal que está empezando a aparecer. "El viernes pasado expulsamos a tres vendedores ilegales", explicó un agente de la Policía Local.

El mercadillo moralo se instala en las traseras de los colegios Campo Arañuelo y Sierra de Gredos y cuenta en la actualidad con 193 plazas. La estructura consiste básicamente en cuatro sectores de venta: alimentación, ropa, bisutería y calzado.

Según la Policía Local, "todos los viernes dos miembros de la policía están destinados a vigilar el tradicional mercadillo". Debido al robo de bolsos hace algunas semanas, una patrulla acude varias veces al día para controlar la seguridad en la zona.