Un grupo de vecinos de Navalmoral mostraron ayer sus quejas por el estado de las calles de la localidad, después de que una mujer sufriera por la mañana una caída al tropezar con un pivote que cierra el tráfico a la calle Albuera con la calle Principal.
El incidente ocurrió sobre las doce del mediodía. La mujer tuvo que recibir atención sanitaria al no cesar de sangrar la herida que se hizo en una rodilla.
Al lugar, además de numerosos vecinos y viandantes que pasaban en ese momento por este punto del municipio, acudió también una patrulla de policía local para avisar al servicio municipal de obras para que arreglaran la imperfección creada en el pavimento.
Los vecinos decían que los problemas se arreglan "cuando ya ha pasado algo", ya que llevan todo el año pidiendo mejoras en algunas de las principales calles, "sobre todo pensando en las personas mayores que se tropiezan con más facilidad".
Uno de los puntos que más molestias causan a los vecinos es el entorno de la iglesia de San Andrés. Según comentaban ayer, "el pavimento es muy resbaladizo y cuando llueve se convierte en una pista de patinaje", por lo que esperan que el ayuntamiento ponga remedio "antes de que ocurra alguna desgracia", indicaron.
