Ayer por la tarde volvió a restablecerse el suministro de agua en la localidad después de que, como informó EL PERIODICO, gran parte de los vecinos permaneciese sin agua desde la tarde del lunes debido al escaso caudal que tiene el río Tiétar.

Según un informe de la empresa concesionaria de agua, Urbaser, esta bajada de nivel del río ha hecho que tuviese que conectarse una bomba de caudal inferior (150 metros cúbicos) a la que actualmente hay en el pozo de Fhelmann, de 450 metros cúbicos. Así, en lugar de abastecer a la población diariamente con 5.246 metros cúbicos, se ha estado suministrando un tercio menos, 3.600 metros cúbicos. Esto ha ocasionado que muchas viviendas no tuviesen agua.

Por este motivo, el jefe del servicio de aguas, José Ramón Pérez, explicó que en la mañana de ayer habían "desviado el agua del río al pozo Fhelmann" a través de una especie de presa de tierra. Además se han instalado válvulas neumáticas y se han lavado los drenes del pozo. Estos trabajos han permitido que se vuelva a instalar la bomba principal, aunque Pérez señaló que ésta no está bombeando al máximo de capacidad por el escaso caudal del Tiétar.