UGT apela a la vía del diálogo para intentar salvar la factoría morala de Fuentecapala, buque insignia del sector textil extremeño, y lamenta la falta de sensibilidad de la empresa.

El secretario general de UGT-Extremadura, Francisco Capilla, lamenta la "muy poca sensibilidad" mostrada hasta la fecha por los propietarios de Fuentecapala, tanto a nivel de empleo como con Navalmoral y su entorno.

Desde UGT se insiste en que el problema no es la falta de actividad de la empresa, sino el interés por ahondar en la deslocalización de su producción.

"Los sindicatos debemos estar unidos para hacer frente a una situación complicada", dice Capilla en relación con los 99 despidos que plantea la empresa bajo las mínimas condiciones que establece el Estatuto de los Trabajadores tras la última reforma laboral.

Representantes de la empresa e integrantes del Comité de Empresa se han reunido hoy en Cáceres con la mediación de la Dirección General de Trabajo.

La reunión llega con muy poco plazo para que termine el período de consulta del ERE emprendido por la empresa, un período que finalizará en la medianoche de mañana.

Capilla se pregunta qué hará la Administración autonómica si no hay acuerdo alguno.

El líder de UGT insiste en que no se dan las condiciones para que la Dirección General de Trabajo apruebe el ERE y ha asegurado que, aunque su decisión no sería vinculante, el rechazo del ERE pondría en una situación muy complicada a la empresa.