Vecinos de la calle Marqués de Salamanca y propietarios de viviendas situadas junto a la N-V han vuelto a mostrar su malestar con los jóvenes que celebran el botellón , ya que han podido comprobar que sigue celebrándose en el lugar habitual, y ello pese a la entrada en vigor de la conocida como ley antibotellón hace 15 días.
Desde el colectivo de vecinos afectados se señala que si bien el viernes no hubo concentración de jóvenes en el citado lugar --que está a escasos metros de las viviendas y junto a la antigua N-V--, el sábado sí se celebró como cualquier otro fin de semana. Según afirmaban indignados, los adolescentes comenzaron a llegar hacia las 23.30 horas, acumulándose una veintena de vehículos que hacían sonar el claxon y subían el volumen de la música.
Los denunciantes insisten en que ese no es el lugar legal para llevar a cabo esta práctica y que tampoco está habilitado. "Tan sólo hay tres contenedores para más de 500 jóvenes, que ni siquiera los usan", señalaba otro vecino que prefiere ocultar su identidad ante posibles represalias de los asiduos al botellón . El mismo residente se preguntó la razón que lleva a las fuerzas de seguridad a no actuar y hacer cumplir la Ley de Convivencia y Ocio.
FALTA LA ORDEN MUNICIPAL
Ante esta denuncia, fuentes de la Policía Local dijeron a EL PERIODICO que aún falta la orden del ayuntamiento que les habilite para poner las multas previstas en la ley, y que por lo tanto sus efectivos se limitan a seguir informando a los jóvenes de que deben abandonar el lugar.
Por otra parte, fuentes municipales explicaron que se está buscando otro emplazamiento para ubicarlo, siendo muy probable que el botellón se instale en la explanada de la piscina municipal, que en otras ocasiones ha albergado otros actos.
