En breve se terminará este terrible periodo de cuarentena, al que se ha visto obligada la población, para frenar el número de contagios por coronavirus. Las fases de desescalada ya son una realidad y es cuestión de semanas que se pueda volver a coger un medio de transporte y disfrutar de escapadas a lugares tan encantadores como Plasencia y el Valle del Jerte

El turismo de interior cobra fuerza año tras año. La experiencia que se vive descubriendo una ciudad o un paisaje tiende a eclipsar las vacaciones de sol y playa en los que cada día se hace exactamente lo mismo que el anterior. Visitar Plasencia y sus alrededores, por ejemplo, gana adeptos en el sector turístico día a día.

La conquista de ciudades con pasado y los entornos naturales toman posiciones, liderando el interés del turismo nacional e internacional. Una buena muestra de destino para estos gustos e intereses se localizan en Plasencia, donde se descubre una ciudad monumental de gran belleza con un pasado medieval de gran interés. Además, muy cerca de este emplazamiento, la naturaleza ofrece lo mejor de sí en el Valle del Jerte, un entorno con encantos para cualquier época del año.

Qué ver en Plasencia

Qué ver en PlasenciaAl visitar Plasencia, el turista se verá sorprendido por su monumentalidad y por su trazado medieval, señal de su importancia histórica. Efectivamente, la configuración de su trazado es el de una antigua ciudad medieval que ha ido creciendo desde el siglo XII. Fue, concretamente, en el año 1196 cuando fue fundada por el rey Alfonso VIII dentro de la guerra contra los musulmanes.

El interés turístico de Palencia se enfoca en su centro histórico, un paseo por sus calles ofrecerá la oportunidad de descubrir rincones con gran encanto y, también, sus principales monumentos. El recorrido que se debe seguir para disfrutar de este espacio elegante y mágico comienza en su plaza mayor y se pierde por sus numerosas y estrechas calles, para ir descubriendo iglesias, edificios palaciegos y antiguos conventos, los restos de su pasado medieval.

En cualquier caso, lo más recomendable es informarse de los lugares con más interés, visitando la página web Visitar Plasencia, la web de referencia con toda la información sobre qué ver y qué hacer en esta bella ciudad. En esta revista digital se encuentran referencias a espacios tan emblemáticos como la mencionada Plaza Mayor, donde se puede ver el ayuntamiento de estilo gótico renacentista, la iglesia de San Esteban o el gran mercadillo donde proveerse de los productos de la zona.

Otros lugares de interés, y que también se señalan e informan en la revista Visitar Plasencia, son la Catedral de Plasencia, la Catedral Vieja, la Catedral Nueva, la Plaza de la Catedral, la Plaza de San Nicolás, su Parador o su Acueducto.

La naturaleza serrana del Valle del Jerte

La naturaleza serrana del Valle del JerteExtremadura entera tiene numerosos destinos de naturaleza, todos de enorme hermosura, pero con toda seguridad, el Valle del Jerte es uno de los más populares, tanto para la contemplación y disfrute de los entornos naturales como para el descanso y el relax.

Y es que, en el Valle del Jerte, ubicado a pocos kilómetros de Palencia, debido a su fabulosa situación y orografía, se crea un microclima ideal para el cultivo de la cereza (picota cuando tiene Denominación de Origen del Jerte) y para la recreación de un entorno natural de inigualable belleza.

Del mismo modo que se puede disfrutar de senderos a través de campos de cerezos como los de la Garganta de las Nogaledas, y el de la subida hasta Los Pilones, dentro de la Reserva Natural de la Garganta de los Infirernos, el atractivo que tienen los pueblos del valle como Navaconcejo, Jerte, Cabezuela del Valle y Tornavacas también merecen ser experimentados.

¿Cuándo visitar el Valle del Jerte?

¿Cuándo visitar el Valle del Jerte?No importa en qué época del año se venga a contemplar y a disfrutar de las maravillas que ofrece este espacio natural sin igual. Cada estación presenta una visión única de este entorno, por lo que lo aconsejable es hacerlo cuatro veces al año, para que puedan apreciarse los distintos tonos y experiencias que regala la naturaleza en este lugar tan privilegiado.

En invierno

La época con menos visitas y la que adopta un aire más casero e íntimo. La tranquilidad y el silencio se adueña de estos paisajes, y es el momento en el que el espectáculo de las corrientes de agua cobra más intensidad. Las gargantas, las cascadas y caídas de agua se vuelven, en verdad, impresionantes.

En primavera

La época con más visitas turísticas, y no es de extrañar, ya que se da una explosión de colorido solo posible en estos lugares. Además, desde mediados de marzo hasta finales de abril se suma la floración del cerezo. Todo un espectáculo de más de 1 millón de estos árboles que sirve de excusa para realizar alguna de las muchas actividades culturales, fiestas gastronómicas, rutas que se llevan a cabo en estas fechas.

En verano

Fecha ideal para sacarle el máximo partido al microclima existente y bañarse en los ríos o piscinas naturales de la comarca.

En otoño

Un nuevo cambio de color, las hojas de los cerezos combinan sus tonos ocres y verdes con el resto de naturaleza, creando un cuadro de gran belleza. Una estación ideal para los amantes de la fotografía.